Llevaban un buen tiempo encerradas, Vane lidiando con una fuerte batalla entre el miedo y el dolor se limitaba a controlar su respiración, mientras que Laura brindo su pecho como refugio, la protegería durante todo el recorrido en esa montaña rusa cargada de emociones...
Vanesa: Ya no puedo -rompió en llanto-
Laura: ¿Es niño o niña?
Vanesa: Niña -sonrió-
Laura: Necesito que cierres los ojos
Vanesa: Mhm
Laura: Déjate llevar
La delicadeza y ternura de aquella dama de cabellos obscuros se encontraba como siempre en su máxima expresión, imitó la posición de Vane a la vez que comenzó a tararearle una suave melodía al oído. Las caricias en el vientre y la voz de Lau no tardaron en apoderarse del momento, invitándo la imaginación a volar. La malagueña sonreía en medio de todo el caos, se había permitido imaginar la vocesita de su pedacito de cielo, la risa e incluso la primera travesura...
🎶Ella es la esencia más pura, es la ausencia que abruma
Si no está junto a mí.
Ella cuando juega me calma, cuando llora me habla.
Hoy le debo mi amor.
Ella, Navidad verdadera, mi primer gran regalo,
El final de mi espera...🎶
El silencio invadió el lugar y un último sollozo anunció la llegada de la pequeña, su madre se inclinó y la recibió en sus manos con todo su amor...
Vanesa: Hola chiquita -susurró- bienvenida al mundo mi amor, mi pequeña Lara
Laura: Lara...como querías ponerle a nuestra hija -sonrió entre lagrimas-
Vanesa: Para que sea guapa como su madre -negó entre el llanto-
Laura: Vane perdóname, perdóname -se aferró a ella-
Vanesa: Ya no hay nada que hacer, pero me encantaría que todo hubiera sido diferente
Laura: Intentemoslo de nuevo
Vanesa: Tengo una familia y tú no formas parte de ella
Laura: Entiendo -bajó la mirada- una última cosa...
Vanesa: ¿Si?
Laura: ¿La puedo cargar?
Vanesa: Con cuidado
Laura tomó a la bebé en brazos, memorizaba cada detalle, cada lunar, su olor. Vanesa observaba la escena y miles de preguntas la atomizaban, no tenía ni idea de que hacer con su vida, pero no tenía duda alguna de que esa pequeña de ojitos cafés y cabello obscuro era su gran amor. Luego de unas horas lograron salir del elevador, inmediatamente fueron trasladadas a un hospital, afortunadamente todo había salido bien.
Toñi: ¿Que pasa hija, no estás feliz?
Vanesa: Lo estoy mamá
Toñi: ¿Entonces por qué esa cara Vane?
Vanesa: Laura volvió y estaba con ella mientras la bebé nació
Francis: Epaa malaguita has conocido el amor de la vida de tu mami
Vanesa: A mí hija contigo no la dejo salir eh, mira apenas unas horas de nacida y ya las cosas que le dices
Toñi: Mejor que no, la pobre de por si ya tiene suficiente con la madre
Vanesa: ¡Mamá!
Toñi: Es la verdad, mañana vendré a ver a mis chicas, cuídala mucho
Vanesa: Descuida má, nos vemos
Francis: Hasta mañana Larita, avísame cualquier cosa chiquilla -desordenó el cabello de Vane-
Vane colocó a Lara sobre su pecho y acariciaba su manita a la vez que le contaba como había conocido a Laura y el porque había elegido su nombre. De un momento a otro la puerta se abrió y Soledad se acercó despacio a ellas.
Soledad: Es monísima -sonrió entre lagrimas- si tiene tus ojitos -besó la frente de Lara-
Vanesa: Si -se rio- somos muy iguales
Soledad: La naricita también, eres hermosa mi niña
Vanesa: Sole, tenemos que hablar...
¿Vane habrá tomado una decisión?
SolBuenfilera23 Gracias por tanto hermosa, te amo🤍