Las carcajadas adornaban el momento, Vane se despreocupó por completo de esas manos que cubrían su rostro, se dedicó a deleitarse por esa pequeña risita que le robaba suspiros...
Vanesa: Te ha reconocido -sonrió-
Laura: Es increíble -se sentó a su lado y tomó a Lara en brazos-
Vanesa: Lo es, para haberte visto solo una vez
Laura: ¿Quien dice que me ha visto solo una vez?
Vanesa: Lau tú...
Laura: Si yo era la que la dejaba en la cuna cada noche en el hospital -sonrió perdiéndose en la mirada de Vanesa-
Vanesa: Pensé que era una enfermera, estuviste todo el tiempo con nosotras
Laura: Sigo estando aunque no me veas, todos estos años intenté estar pero es difícil seguirte la pista
Pastora: Es Vane -tomó a Lara en brazos- vallan con cuidado
Vanesa: ¿Que se supone que planearon ustedes dos?
Pastora: No seas curiosa, ve
Vanesa: No me iré sin Lara
Pastora: Te irás si, yo la cuidaré
Vanesa: Pilar...
Pastora: Anda niña, rápido que esta pequeña va a estar bien
Vanesa: ¿A 4 ojos ok?
Pastora: ¡Ok Capi!
Tomadas de la mano subieron al bote encargada de llevarlas a su destino, la incertidumbre se acrecentaba en Vane a medida que se iban alejando de la orilla. Alrededor de unos 30 minutos llegaron a esa isla en medio de la nada que en más de una ocasión fue la cómplice de su amor clandestino. Un camino de velas las recibió, en cada palmera había una foto de ellas y un sobre que guardaba diversas anécdotas que poco a poco relataban esa parte infantil de su amor, avanzaron un poco más encontrándose con una sencilla cabaña a su estilo, una reproductora, para ser exactos dónde ambas escucharon el 1 éxito de Vanesa...
Vanesa: ¿Por qué haces todo esto?
Laura: Porque no me voy a rendir tan fácil, porque te amo, porque nos amamos
Vanesa: No es el momento
Laura: Deja de esperar a que todo sea perfecto, eso nunca va a pasar -prendió la reproductora y se comenzó a escuchar "Sintiéndonos"- ahí está la salida -señaló acercándose lentamente a ella-
Vanesa: Decido quedarme dentro, ve bajando la bandera, sobra tela en este cuerpo -cantó sobre sus labios-
Laura: ¿Sintiéndonos una vez más, hasta que nos cueste respirar?
Vanesa: Gáname la vida-mordió su labio inferior- hazme el amor una vez más...
Laura: Hasta que nos cueste respirar -se apoderó de sus labios-
Eran solo ellas en esa isla ausente de todo el caos, dos respiraciones con un ritmo a contratiempo, unos labios que no paraban, unos cuerpos con sed de esas caricias al alma que no tardaron en aparecer obligando a la ropa a abandonar el momento. Se amaron de todas las maneras posibles, no quedó un solo centímetro de sus pieles sin adorar hasta caer rendidas ante el placer...
Vanesa: Ay Vanesa, Vanesa -se mordió el labio-
Laura: ¿Que pasó?
Vanesa Pasa que soy tan tuya que ni yo, ni yo misma me lo aguanto
Laura: ¿Eso quiere decir que no te arrepientes?
¿Cuál será la respuesta de Vanesa?
