Desperté lentamente y al mirar por la ventana note que seguía en este lugar, cada mañana deseaba que todo esto sea un mal sueño.
Me levanté y mire mi demacrado rostro en el espejo así que tome una toalla y camine directo abajo. Entre lentamente en la piscina sintiendo como el cuerpo se iba acostumbrado a la fría temperatura del agua.
Eran las 3 de la tarde aproximadamente, dormí mucho y eso me hacía sentir aún más cansada. Sumándole, claro, la cantidad de estrés que tenía encima.
- aquí estás - dijo kuina sentandose en la orilla y yo le sonreí con tranquilidad - te busque en tu habitación y me preocupe un poco al no verte.
- lo siento pero necesitaba refrescarme urgentemente - le dije y ambas reímos.
- estoy nerviosa por jugar hoy - dijo y yo asentí con una mueca.
- tengo una relación agridulce con los juegos - dije y me acerque a ella - por un lado odio jugar por todo en general, pero por otro, los tomo como algún tipo de distracción de todo.
- te entiendo, me pasa lo mismo - dijo ella y ambas sonreímos para confortarnos la una a la otra - pero no tenemos opciones.
- lo sé - dije jugando con el agua - júrame que te irá bien hoy, no sé que haría sin ti.
- solo volveré si tú lo haces - dijo ella mirándome.
- ambas lo haremos, es una promesa - dije y ambas sonreímos.
Chapotee el agua haciendo que varias gotas cayeran en ella y se estremeció al sentir el frío y yo rei mientras chapoteaba más, ella empezó a mover sus pies para tirarme agua y yo jale una de sus piernas haciendo que caiga directo en la fría agua.
- maldita - dijo ella en la superficie y yo rei.
Ambas empezamos una guerra de agua hasta que un par de personas nos regañaron por salpicar agua fuera de la piscina y ambas respondimos sacando la lengua ganando malas miradas.
Salimos de la piscina ya que estaba empezando a oscurecer y tuvimos que compartir toalla ya que ella no había traído una, de todos modos no estaba en sus planes meterse.
Caminamos hasta mi habitación mientras kuina me maldecia por haberla mojado pero yo solo soltaba fuertes carcajadas.
Luego de que ambas nos hubiéramos cambiado de ropa salimos del lugar, no medimos la hora y al salir notamos que en un momento tendríamos que ir a jugar.
En el camino tuvimos la mala suerte de encontrarnos con el querido chinchiya.
- hola chinchi - le dije y el rodó los ojos - amargado.
- entran listas para jugar? - nos preguntó y kuina y yo intercambiamos miradas para luego asentir un poco dudosas - les deseo suerte.
- suerte sería comer algo - dije y kuina me apoyo así que fuimos en busca de unas galletas.
Luego de tener las galletas fuimos al lobby a escuchar el típico discurso del sombrerero antes de jugar y nos paramos en la parte más alejada. Mientras escuchaba el típico discurso y metía un par de galletas en la boca note la sensación de una mirada y al subir la vista note a niragi mirándome desde el balcón.
Mire en otra dirección pero decidí joderlo un poco así que me empecé a acercar a chishiya sin que el se de cuenta y mientras le dirigía la mirada a niragi el cuál continuaba mirándome, sin quitarle la mirada extendí mis brazos y envolví a chishiya, niragi rápidamente se alejo y dejo de mirarme, tuve suerte porque al segundo sentí el fuerte empujón de chishiya.
- solo era un poco de suerte imbécil - dije slbamdo mi hombro y el rodó los ojos - ojalá te quedes ciego de tantas veces que mueves tus ojos.
El discurso termino y todos salieron extasiados a jugar, nos dividimos al grupo y tuve que subir a uno de los autos y mientras miraba mis uñas esperando que todos suban escuché un quejido que conocía muy bien.
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EYES TALK / Alice in borderland
Fanfiction"una mirada vale más que mil palabras" Me faltaron muchas cosas por decirte, y ahora nos encontramos en este infierno. La diferencia es que ya no eres el chico que yo conocí, pero me daré la oportunidad de conocerte en esta versión, solo si tú me de...