❝Becky tenía preguntas para Freen, preguntas de las nunca escuchó respuesta.❞
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Esta historia no es mia, es solo una adaptación, todos los créditos y derechos para su escritor/a original: @tobaccosunburst_
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Escribió la primera pregunta recordando lo último que le dijo antes de irse de su vida "Eres la mejor persona que he conocido...." tal vez eso también debió ser mentira porque si fuera la mejor persona que conoció, no la hubiera dejado en aquél café de Myeongdong con su corazón roto y sus sentimientos pisoteados. No la hubiera dejado con sus metas a su lado en el olvido, no la hubiera dejado llorando cada día después de ir a su trabajo. Simplemente no la hubiera dejado.
"No debí confiar nunca en tí" escribió con perfecta caligrafía en el inicio "Siempre fui una tonta que creyó en tí, en tus sonrisas falsas y en tus sentimientos de felpa" limpió las lágrimas que se caían libremente "Nunca debí enamorarme de tí Freen Sarocha, pero aún así lo hice y no sabes cuánto me arrepiento de haberlo hecho"
A su mente llegó la inexperta Becky de diecisiete años, esa que con unas cuántas citas cayó en la trampa de Sarocha. La pelinegra había llegado con su sonrisa perfecta, enamorandolos a todos y aún así la había notado a ella y a su belleza escondida. Se había sentido tan querida con sus abrazos, con sus besos y con los detalles que según ella eran los mejores que había recibido. ¿Habían sido falsos acaso?
"Creía que tú eras el amor de mi vida porque fui ingenua, porque solo había tenido un novio antes que no había sido el mejor con los sentimientos"
Había llegado de Bangkok porque su familia había querido cambiarse de aires y qué mejor que en su ex colonia. Tenía una sola hermana y sus padres eran tan ortodoxos como altivos, lo que se notaba muchas veces en su primogénita. Freen no había sufrido más allá de un golpe accidental en su vida, sus padres jamás le pusieron un dedo encima y nadie se metía con ella por el hecho de que podían acabar peor que ella. Ni un razguño había estado en esa cara de porcelana y eso hacía que ella no tomara en serio nada, nisiquiera el dolor palpante que se le notaba a Becky.
—No puedo estar más en esta relación, Becky—Dijo después de haber rechazado su beso como saludo olímpicamente—. Eres la mejor persona que he conocido.
No sabía si eran más falsos sus sentimientos o sus palabras. Tal vez ella misma con su cara de niña buena y atractiva. Pero Becky ya veía lo que realmente era.
Una impostora.
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