Naruto ni Harry Potter me pertenecen son de sus respectivos dueños así como los animes que salgan aquí.
Sin mas que decir se despide su amigo y que comience este jodido capitulo.
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Ella era Iris Anastasia Dumbledore Wright y siendo sincero se encontraba muy aburrida, lentamente jugueteo con su cabello carmesí dándole dar vueltas sobre su dedo.
Llevaba en su cintura su barita mientras se preguntaba si no sería penalizada por conjurar un pequeño conejo de fuego para quitar su aburrimiento.
Desde su nacimiento había sido tildada de prodigio, controlo y superó todos los ámbitos de la hechicería Europea, se especializó en hechizos de fuego y en la rama de la esgrima.
Caminaba por los pasillos del ministerio de magia, cerca de la biblioteca para aurores que era su destino final, debido a que no se permitían criaturas mágicas no autorizadas dentro del ministerio Fenris tuvo que quedarse en su hogar, aunque ella la dejó con mucha comida para que la loba no pasara hambre mientras ella no estaba,
Su placa el brillaba a unos centímetros arriba de su corazón debido que era de suma importancia tenerla en estas zonas para evitar malos entendidos.
Entonces llegó mientras que abría sus ojos ligeramente ante la visión al frente suyo y su cuerpo sentía un escalofrío pasar lleno de adrenalina.
Dos guardias que custodiaban la puesta se encontraban completamente noqueado y sentados en el suelo, vivían ya que podía ver claramente la suave respiración y no tenían heridas en su cuerpo ni tampoco su cara parecía adolorida por lo que supo que habían sólo sido noqueados.
A zancadas grandes se aproximó a la biblioteca mientras que su varita era desenfundada, con resolución abría la puerta de la biblioteca.
Entonces lo vio.
Un hombre que se no le podía ver el rostro estaba presente mientras que en su mano contenía un libro.
El libro era sobre maldiciones avanzadas en magia negra y cuales eran sus castigos correspondientes, ese libro era sobre las leyes mágicas de Europa.
-¿Puedes creerlo? En Europa se castiga el Crucius, el Imperio y el Avada Kedavra con ir directamente a Azkaban, esas tres maldiciones son ligeras a comparación de varios hechizos que ustedes dejan usar de manera libre, solo por el mero echo de que se necesita verdaderamente hacer daño al enemigo para lanzarlo, yo no lanzaría a alguien un Sectumsempra porque me cayó bien con el que estoy peleando-Hablo suavemente sin voltear a ver a su nueva acompañante.
-¡TIRA LA VARITA A UN LADO Y PONTE DE RODILLAS!-Grito Iris apuntando su varita ante el hombre que seguía leyendo.
El hombre dio un suspiró mientras que suavemente cerraba el libro poniéndolo donde lo encontró, fue verdaderamente gratificante tal lectura, además aprendió un poco sobre las leyes de Europa para así no meter la pata.
Uno de los cambios más radicales era que en Europa se veía el medio antes de conseguir el fin, si el medio era cuestionable ellos no lo tomarían por más fácil que fuera.
Esto suponía un cambio grande, en oriente se podía dejar morir batallones enteros con tal de dar caza a un mago tenebroso de alto calibre.
Parece que aquí valoraban la amistad y la comprensión ante todo.
Menuda mierda.
No se daban cuenta que cuando uno moría lo hacía solo, es más si tenían la oportunidad de dejarle morir lo iban a hacer ya que todos eran egoísta incluyendole, todos pensaban que la vida propia era superior a la de los demás incluso si habías sido la peor miersa en existir.

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Auror
FanfictionNo pos. Puto el que lo lea Como sos puto que sigues leyendo. Que puto eres que incluso después de tres veces sigues leyendo