Rosé Gram

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rosé

muchos me preguntaban como nos habíamos conocido con mi mommy y cada vez que recordaba aquella historia sonreía de manera tonta y mis mejillas se sonrojaban.

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Era un día normal de mi trabajo como modelo hasta que llegó  la noche en donde tenía una fiesta con mucha gente importante, cómo más modelos, fotógrafos, jefes de hotelerías y más.

Una de mis amigas pedía los tragos uno tras el otro haciendo que después de unos cuantos ya se notara el alcohol que teníamos en la sangre el cual ya había afectado en nuestra vista, bailamos casi toda la noche hasta que vi el caño de pole  dance en donde anteriormente había bailado una chica, mis amigos comenzaron a alentarme para que me suba y después de

El dj puso una canción adecuada para que pueda hacer un baile sexy y en poco tiempo se hicieron notar mis años practicando aquel deporte, mi ropa o era la adecuada por lo que no pude hacer mucho pero si lo suficiente como para que mi público que se había formado en pocos minutos aplaudiera y pidiera por más. Entre risas bajé del escenario luego de unas cuantas canciones, fuimos a la pista para poder bailar con más personas hasta que sentí unos brazos tomarme por la cintura, me giré riendo y vi a la mujer más hermosa que había visto en toda mi vida. Bailamos unas cuantas canciones juntas provocándonos hasta que tomó mis mejillas y nos hundimos en un beso desesperado y húmedo. Mis manos recorrían su cuerpo tocándola a mi gusto mientras ella aplastaba mis pechos.  

Le hice una señal para que me siguiera llevándola a los baños de la discoteca los cuales eran bastantes lujosos, allí me subió a la mesada del lava manos mientras nos besábamos y se separó para hablarme -Cómo te llamas? soy Madeleine- me pregunto con una sonrisa -Soy Rosé- respondí mirándola a los ojos, volvimos a besarnos y ella descendió sus besos por mi cuello hasta arrodillarse delante de mi para bajar mis bragas y besar mis muslos hasta llegar a mi intimidad donde comenzó a repartir besos  y lamidas sacándome  varios gemidos. Estaba apunto de correrme hasta que alguien tocó la puerta del baño y tuvimos que salir. 

Al salir le susurré en el oído que me siga si quería seguirlo en mi casa lo cual  accedió  y salimos de  la disco encaminándonos hacia mi auto donde nos subimos y conducí hacia mi casa, en el trayecto hablábamos sobre nuestras vidas donde ella me contaba que era fotógrafa y que tenia su propio estudio de modelos. Por lo que sonreí y me comentó que le había gustado mucho una de mis campañas.

Al llegar fuimos directamente a mi habitación donde me recostó en la cama volviéndome a besar y esta vez sacó aquel vestido negro que llevaba tirándolo al piso, al estar desnuda a su merced comenzó a chupar mis pechos haciéndome gemir y sonrojarme para luego meter dos dedos en mi haciéndome arquear la espalda. Sus dedos se movían con destreza en mi interior y gemidos chocaban contra sus labios al estar besándonos.

Ella todavía estaba en ropa interior por lo que la deje debajo de mi para quitar sus bragas y aquel brasier que cubría sus voluptuosos pechos al verlos no pude evitar llevarme uno a la  boca y empezar a chuparlo con desesperación escuchando sus jadeos.

Mientras las dos nos complacíamos me puse en cuatro sobre ella para llevar mis labios a su húmeda intimida que ya pedía por atención, pude volver a sentir sus dedos dentro mío y sus lamidas en mi clítoris mientras que yo hacia exactamente lo mismo con ella ahogando nuestros gemidos en la intimidad de la otra.

Tuvimos varios orgasmos en la noche hasta que decidimos ducharnos e irnos a acostar, ya se podía ver el sol brillando e iluminando la ciudad. Al acostarnos Madeleine me abrazó por la espalda dejando en min pecho aun desnudo, caímos rendidas sobre aquella cama en la que habíamos follado por horas.

pt2 mañana!