Todos en el pueblo se sorprenden por ver el cielo oscurecerse de la nada.
─¿Qué son esas nubes negras?
─¿No desaparecerán personas de nuevo o sí?
─¿Acaso lloverá?
─Pero si hace unos minutos estaba apenas nuboso...
Algunos no le dieron importancia, y siguieron con sus actividades, otros, en cambio, se mantuvieron dentro de sus casas, unos por si llegase a llover, porque parecían nubes de tormenta, y otros por si significaba una nueva oleada de desapariciones.
Sin embargo, ellos ya no corren peligro, Sanae y los demás sí.
El señor Mikami, el entrenador personal de Genzo y encargado de su cuidado, no está en la casa, sino que fue a salir con un compañero, y las mucamas fueron a hacer algunas compras, ya sea comida o nuevos artículos de limpieza; no hay nadie más en la casa, a excepción de los niños, o bueno, su perro John, quien escuchó los gritos de ellos y subió hasta la habitación del chico, pero no pudo ver al fantasma de Onisa Kyuno.
─¡JOHN, VETE DE AQUÍ!─ le grita Genzo desesperado.
Sin embargo, su perro no hizo caso, ya que no entendía el lenguaje humano, con excepción de las típicas palabras que los dueños le gritan a sus perros: "¡Tráela!", "¡Ven acá!", "¡Siéntate!", entre otras. Lo que les sorprendió fue que Onisa no intentó atacar al animal; John no corre peligro alguno.
─¿No... lo atacó? Ufff─ suspira aliviado, pero sin perder el miedo que estaba sintiendo debido a la presencia del fantasma.
─Oigan, ¿de dónde salió esa niña?─ pregunta Urabe, temblando de miedo y agarrándose de Ishizaki, a quien utiliza como "escudo humano".
─¡NO ME PONGAS ADELANTE, TONTO!
─¿P-por qué está toda lastimada? ¿Dónde están sus ojos y su lengua?─ pregunta Misaki.
─¡Porque fue asesinada cruelmente, imbéciles! ¡¿Qué acaso nunca me prestaron atención cuando les conté todas esas historias?! ¡¿Tan aburrida soy?!
─Pues sí─ responde Hyuga.
La pelirroja lo mira con desaprobación.
─No es momento de estar peleando, ¿no ven que tenemos a un fantasma frente a nosotros con la intención de atacarnos?
─Dejen de hablar, yo me haré cargo de ella. Sé como apaciguarla─ Sanae da unos pasos hacia el frente, a unos pocos metros de la pelinegra.
─Sanae, estás haciendo algo muy arriesgado.
─Es mejor eso que quedarse temblando como una gallina.
─Pssh, yo no soy una gallina, soy un tigre─ Hyuga se corre el cabello hacia un lado, con un gesto que denota superioridad.
ESTÁS LEYENDO
𝗜𝗝𝗢𝗡𝗔 𝗞𝗢𝗧𝗢 ❱ Capitán Tsubasa ✔
Fanfiction異常なこと 𝐈𝐉𝐎𝐍𝐀 𝐊𝐎𝐓𝐎 ↳「 COSAS ANORMALES 」 En un pueblo japonés llamado Isano tiene lugar una serie de desapariciones entre los habitantes (que todas terminan en muertes desgarradoras), cada treinta y cinco años el pueblo es testigo de una horri...