Capitulo 38

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En la oscuridad de una habitación iluminada apenas por una vela se escuchaba claramente los murmullos y gemidos placenteros de dos voces femeninas junto al sonido de un gruñido bajo y el delicioso sonido de algo entrando y saliendo de manera lenta en algo húmedo como resbaladizo.

A la luz de la vela se acercó el rostro de cierto hijo de Artemisa, el cual tiene un sonrojo dorado, los ojos entrecerrados en placer y la boca entre abierta soltando leves gruñidos como jadeos de placer.

Una cadena tintineo en la oscuridad, hubo un sonido de algo cortando el aire antes de que el sonido de carne siendo golpeada por cuero trabajado inundara el lugar junto a un leve chillido de placer.

Susurros femeninos fueron escuchados junto al sonido de otra voz femenina gimiendo mientras gemía con fuerza el nombre de Naruto, el cual tenía dos de sus manos cerrándose en puños antes de abrirse, aguantando los jadeos y gruñidos mucho mas animales como fuertes que querían salir de su pecho.

Pronto, otra persona se unió a el a la luz de la vela, siendo Thalia, que estaba gimiendo, con la cara roja y los labios algo hinchados por leves mordiscos si la marca de dientes en sus labios eran algo por pasar.

La pelinegra reclamo los labios del rubio, ambos besándose con hambre y deseo descontrolado mientras la oji azul gemía de forma ahogada ante las dos manos desocupadas del rubio amasando sus glúteos junto algo mas que nadie mas podría ver en la oscuridad.

Y en ese momento, la diversión fue interrumpida cuando la puerta fue abierta de golpe mientras la luz de la habitación era prendida, causando que tres cuerpos desnudos detenidos por la sorpresa estuvieran al a vista de cualquiera, el de Naruto, Thalia y Annabeth.

El rubio estando acostado boca arriba con la rubia atada con cadenas al estilo bondage y a mitad de camino de meter el pene del hijo de Artemisa en su vagina, además de que la oji gris tiene la entrepierna de la pelinegra en su cara mientras las piernas de la oji azul le rodeaban la cabeza con fuerza por el placer, mientras el resto de la hija de Zeus estaba contra el hijo de Artemisa, el cual se había separado del beso como la semidiosa pelirroja por la sorpresa, mientras la cara de la hija de Atenea era expuesta al mundo al las piernas de Thalia aflojarse dejar caer sus caderas y liberar a la semidiosa rubia de su labor oral.

Ahora, las que habían entrado a la habitación donde sucedían actos tan carnales y lujuriosos fueron las cazadoras, que se quedaron en estado de shock y con un sonrojo atómico al ver el hijo de su señora con dos de sus amantes en pleno acto carnal.

El bijuu rubio fue el primero en recuperarse, causando que tomara con delicadeza a Thalia y la dejara a un lado antes de salir del interior de Annabeth y tapar a ambas con una sabana, a la cual ambas chicas se aferraron con miradas de ira a las cazadoras por haberles interrumpido.

El nieto de Shiva solo se paro en su gloria desnuda antes de ver a sus hermanas adoptivas.

''Vamos'' susurro el hijo de Minato con una sonrisa juguetona mientras invitaba a sus hermanas a irse.

''Vamos'' dijo el Namikaze ahora mas alto mientras sus sonrisa juguetona se volvía simplemente una sonrisa que no llegaba a sus ojos.

''DIJE VAMOS'' grito el campeón de Hades con enojo mientras empujaba con sus cuatro brazos a sus hermanas, que salieron disparadas de la habitación.

''Lo lamento, pero voy a hablar con mis hermanas sobre esto'' dijo Naruto en forma de disculpa a sus dos novias, que asintieron y tenían miradas enojadas dirigidas a las cazadoras.

El rubio hizo que la parte inferior de una túnica blanca apareciera rodeando de sus caderas para abajo antes de salir de su habitación y cerrar la puerta detrás suya.

Naruto Hijo del zorro y la cazadoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora