Capítulo 46 (Final de La Maldición del Titán)

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Artemisa le dio un beso amoroso a Minato, el cual estaba a las puertas del templo de Artemisa.

Ambos se mostraron amor antes de que el Bijuu se fuera, saltando entre los templos para llegar a algún lugar que no había querido decirle a su esposa querida.

De las sombras apareció Naruto, que miro la dirección en la que se había ido su padre, notando desde su punto lejano como una única lágrima caía del ojo izquierdo de su padre, causando que Naruto se diera media vuelta, entrando al templo de su madre, la cual le siguió de cerca con un suspiro triste.

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Thalia, Annabeth y Zoe se encontraban hablando tranquilamente, saboreando el desayuno preparado por Naruto mientras clones del rubio hacían masajes en sus pies, causando las risitas de las tres al tener cosquillas.

Siendo la situación que vio Naruto tan pronto entro a su habitación en el templo de Artemisa, viendo con amor y una sonrisa calmada a sus amadas, que al notar su presencia le sonrieron y abrieron sus brazos, invitándolo a unirse a ellas.

Y el rubio entonces se dejó descansar, dejo que la calma y la vida lo llenaran antes de que el caos y la muerte tocaran a su puerta para el acto más cruel en este acto que llaman vida.

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El mundo Shinobi estaba extasiado.

Nuevos contratantes habían salido desde otro mundo, pidiendo sus servicios, pidiendo únicamente a los Jinchuriki como fuerzas contratantes para poder ganar la guerra que se estaba haciendo en el otro mundo.

Todos querían ir, incluso si no fueran Jinchuriki, pedían a gritos ser los siguientes en ser elegidos, todo por las riquezas que prometían por simplemente completar una única misión.

Prometían y mostraban oro puro, toneladas de oro puro, era demasiado para cualquiera, todos se estaban lanzando como perros rabiosos.

Sin embargo, todos temblaron cuando escucharon que los enemigos de estos contratantes habían logrado que un solo hombre matara al Jinchuriki de Ichibi, una lucha que se dio en medio del País del Viento, sin que nadie se diera cuenta hasta que sintieron el último puso de Ichibi en este plano por los siguientes años hasta que volviera a formarse.

Esto hizo que todos se replantearan enviar a sus Jinchuriki.

O al menos así fue hasta que uno de los contratantes dio una única idea.

Contratar a todos los Jinchuriki para matar a este hombre capaz de destruir a un Jinchuriki en una pelea uno a uno, obviamente con cantidades de oro y riquezas que hicieron babear a todos y aceptar, olvidando sus rencores simplemente para poder tener esas riquezas infinitas.

Pronto empezaría una batalla muy importante, solamente había que esperar un poco...

Y entonces vendría la Era Dorada.

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En medio de un reino más haya de la imaginación humana podemos ver una isla en las nubes, donde hombres y mujeres con rasgos zorrunos caminaban, haciendo sus días como personas normales.

Sin embargo, en un torreón en medio de la isla podemos ver a decenas de chicas adolescentes con rasgos zorrunos con trajes de Miko haciendo reverencia ante Naruto y Minato, que estaban vestidos apenas con telas de seda translúcida que apenas si ocultaban su entrepierna.

Manjares y cuerpos humanos mutilados fueron puestos delante de ambos Kyubi, que devoraron con ansias el alimento dado, siendo vistos por las adolescentes, que estaban sonrojadas y se empujaban unas a otras mientras veían a sus dioses protectores comer sus sacrificios.

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⏰ Última actualización: Jun 11 ⏰

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Naruto Hijo del zorro y la cazadoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora