𝑻𝒉𝒆 𝑯𝒐𝒘𝒍𝒊𝒏𝒈

Capitulo 1

Nuestra historia empieza en una casa, en medio del bosque. Una casa grande a decir verdad, y sin embargo solo dos personas habitaban allí. Una joven de 15 años, y su hermano menor de 11. Emma y Charlie eran sus nombre respectivamente.

Era temprano aun, 6:35am para ser exactos.

Ambos hermanos se preparaban para ir a estudiar, Emma ya estaba lista pero Charlie aún estaba en cama. Despierto pero en cama, y con una pereza que le impedía si quiera moverse. Cuando escuchó los pasos de su hermana acercándose se cubrió con la sabana por completo.

-¿Charlie?

El menor pretendía dormir bajo las sabanas quedándose quieto.

-Vamos Charlie, se nos hará tarde.

-¿Qué hora es...? -Preguntó aparentando somnolencia.

-Son las 7:15. -Mintió para que se apure.

-¿En serio? ¿Como la otra vez que dijiste que ya era tarde pero aún faltaba como una hora para que empiece la clase? -Se asomó lentamente por debajo de la sabana.

-.............-Emma se le quedó mirando.-Tu solo apúrate, quieres?

-Ugh.. no quiero... me da pereza, y encima es lunes. ¿Puedes creerlo? -se acurrucó en su almohada.

-Apresúrate porque vamos a llegar tarde, y tu eres quien mas demora en alistarse.

-Dime la hora primero.-Exigió.

-Mmm....-La de cabello castaño rodó los ojos.- 6:37 -Contestó.

-Entonces dame 5 minutos mas.-Cerró sus ojos.

-Esos 5 minutos pasan volando y lo sabes, no puedes estar en cama todo el día.

-Quieres apostar?

Una sonrisa se formó en los labios de Emma, como lo que sale de dos puntos y un paréntesis. Entonces salió de la habitación y minutos después regresó con un balde.

Charlie abrió sus ojos de repente cuando se percató que el balde traía agua dentro.

-Espera-!

Tarde. El agua ya lo había empapado, solo una parte del rostro que apenas había salpicado en las sabanas, pero como todo niño dramático gritó:

-Maltrato infantil!! -Y luego se limpió con el antebrazo.

-Jajaja, solo apresúrate. Tu desayuno esta servido peque -w- -Y sin mas salió de su habitación.

-Eso contó como baño?! -Gritó desde adentro.

-No! -Respondió Emma con una risita.

(. . .)

Una vez llegaron a la escuela, se despidieron y fueron a sus respectivas aulas. En el camino, Emma iba pensando si había olvidado alguna tarea o algo por el estilo, y que si era así tendría tiempo para hacerla en la primera clase, sin prestar atención y tener que pedir prestado a su compañero mas cercano. Pero era algo que podía manejar.

Sin embargo, sus pensamientos fueron interrumpidos cuando escuchó al alguien murmurar sobre el baile que se acercaba por el aniversario del colegio. A ella le llamaba muy poco la atención ese tipo de eventos, en especial porque sabia que no podría asistir por cuidar a su hermano. Incluso si tuviera la oportunidad de ir, se sentiría muy sola y lo mas probable es que termine en un rincón comiendo los bocaditos de la mesa principal.

Así que descartó esa idea por completo.

Percibió un olor familiar que la hizo levantar la mirada, una chica pasó por su lado y la miró de reojo con sorna. La castaña solo suspiró y desvió la mirada mientras seguía caminando hasta llegar a su salón.

Aun faltaban 10 minutos para que empiece la clase así que pasó desapercibida con los pocos alumnos que ya estaban presentes y se sentó en su sitio.

(. . .)

Estaba corriendo por los pasillos, siendo perseguido por sus agresores, podía escuchar su respiración agitada mientras iba rápidamente a lo que ,para su sorpresa, resultó ser un callejón sin salida. Lo tenían acorralado, y en la pared se veía las figuras de tres personas.

Cerró sus ojos esperando lo peor, pero entonces se encontró así mismo haciéndoles daño a esas personas... y con liquido rojo escurriendo de su boca. Un lobo con el hocico manchado de sangre.

Charlie despertó dando un pequeño respingo y se dio cuenta que aun estaba en su carpeta. En su salón de clases. En un parpadeo había visto tres escenas distintas, para que lo terminara despertando la campana de recreo. Y luego recordó que había tomado esos últimos 3 minutos restantes antes de salir para descansar sus ojos.

Suspiró con pesadez mientras escuchaba el insistente sonido de la campana.