Cap. 6 - No quiero ser solo tu mejor amiga -

902 73 9
                                    

Pov, T/N:

Había pasado una semana desde que Wanda y yo habíamos discutido, semana en la que no nos hemos dirigido ni una palabra y existía un juego de miradas silenciosas dedicadas. Nunca nos habíamos peleado de esta manera, pero no podía volver a confiarle mi corazón en sus manos, tenía que comenzar a pensar en lo que decía y no pensar que con un lo siento todo estaría resuelto, yo solo la estaba defendiendo, pero tal vez tenía razón y no debería meterme en su relación con Visión, no podía ir metiéndome en sus asuntos cuando no soy más que su mejor amiga... aunque quisiera ser más que eso.

Me sentía mal por Wanda, sabía por Pietro que Visión ya no pasaba por ella y aparte no se les veía juntos desde su pelea también, realmente quería dejar mi orgullo, solucionar el problema y estar ahí para escucharla y que no se sintiera sola, sabía que ella me estaba dando mi espacio, pero creo que en el fondo solo quiero que venga corriendo a mi y toda esta pesadilla acabe de una vez.

Hoy era viernes y Pietro había insistido en que fuéramos a una fiesta después de la victoria de su partido como era costumbre, lo extraño era la insistencia de Pietro, esta vez parecía no aceptar un no por respuesta cuando otras veces solo va el solo, realmente yo no tenía el ánimo para ir y además Kate estaba enferma para acompañarme porque sabía perfectamente que Pietro me dejaría a mi suerte en cuanto viera alguna chica guapa; pero aún así termine acompañándolo no le iba a ganar a su terquedad.

El había decidido manejar esta vez, otra cosa extraña ya que siempre me encargo yo de manejar porque el termina con todo el alcohol de las fiestas.

Habíamos llegado y había un buen ambiente a excepción de Visión que también estaba ahí, el cual decidí ignorar que existía, el solo verlo me llenaba de coraje, pero al parecer ni el ni yo teníamos a Wanda en estos momentos. Y hablando de ella era raro no verla por ningún lado, ella nunca se pierde ninguna fiesta.

Como lo había imaginado Pietro estaba coqueteando con chicas y yo por el contrario, no había ninguna chica que me fuera a sacar a Wanda de la mente y al parecer el alcohol que corría por mi cuerpo solo agudizaba la tristeza, intente distraerme yendo a bailar entre todas las demás personas, dejándome llevar por la música en mi propio mundo.

Hasta que una chica pelirroja se acerca a mi.

- ¡Hey T/N! no pensé verte aquí, normalmente no asistes a las fiestas - Dice Nat gritando por la música alta.

- ¡Nat! tampoco sabía que estarías aquí, en realidad sólo vine a acompañar a un amigo, no soy tanto de salir de fiesta - Me alegraba saber que ahora tendría algo de compañía en esta fiesta.

- Deberías venir más seguido, hay chicas muy lindas que por lo que veo más de una no te quita la mirada de encima - Dice Nat entre risas.

- Sabes que sólo tengo una chica en mente y justo ahora no tengo los ánimos de coquetear con alguien - Digo regalándole una media sonrisa.

- Entonces mueve ese culo y hagamos que esos ánimos mejoren, no se viene a una fiesta a estar triste - Dice Nat tomando mis manos para hacerme bailar.

Nat era otra de las personas que más adoraba en el mundo, siempre ha sido tan buena amiga conmigo y lo más increíble ha soportado desde hace años escucharme hablar de mis sentimientos por Wanda, siempre decía que tenía que decirle como me sentía que si en verdad era su mejor amiga no tenía porque salir nada mal en caso de que no le gustará, pero ese nunca había sido mi plan.

Sentía que llevábamos horas bailando, Nat bailaba increíble y podía sentir como era la envidia de muchos que estaban detrás de ella, el solo balanceo de sus caderas mientras sentía la música y se dejaba llevar era hipnotizante, Nat y yo teníamos una amistad tan genial y segura de que ambas no sentíamos algo más por la otra, que nuestra naturaleza era coquetear hasta que alguna se pusiera nerviosa.

Y ese juego Nat lo estaba comenzando, quedando de espaldas pegándose cada vez más a mi cuerpo y pasando sus manos por atrás de mi cuello con un roce que me ponía ciertamente de nervios, olvidando por completo todo lo que atormentaba mi mente, olvidando que había más gente alrededor y dejándome llevar al ritmo de su cuerpo poniendo mis manos en sus caderas y solo disfrutando de este baile.

De repente siento como alguien me jala por el brazo hasta sacarme de la casa en donde era la fiesta y... ahí estaba ella que a pesar de verme con molestia no dejaba de verse tan perfecta y linda bajo la luz de la luna, sus ojos verdes con una tonalidad más oscura de lo normal, su cabello rubio cayendo en unas ondas no tan marcadas y dios ese vestido negro que parecía hecho a la medida para ella. Wanda estaba enfrente de mi de brazos cruzados, sentía que era producto de mi borrachera hasta que habló.

- Tal parece que la única que le importa nuestra amistad soy yo - Dice Wanda con enfado en su voz, no podía entender que había hecho para molestarla de esta manera, literalmente no habíamos hablado en una semana y ahora llegaba de la nada a reclamarme por nada.

- No entiendo a que viene ese comentario, tu fuiste la culpable de que esta amistad se este arruinando y ahora vienes como si nada pasará y me sacas de bailar con Nat -

- ¿¡Eso era un baile!? porque parecía todo menos uno, ¡parecía más que te la querías follar! - Dice rodando los ojos. No se si era el alcohol que había tomado pero en este momento eso sonaban a celos.

- Si me la quiero follar es cosa que a ti no te va ni viene, pensé que lo había dejado claro, yo no me meto entre tu y Visión y tu no te metes con mi vida, como dijiste no necesito de un guardaespaldas que resuelva mis problemas - Dije con enojo.

- No quiero que sigas fingiendo que no te importo, que no existo, eres mi mejor amiga y te necesito, no existe nadie más en el mundo que me importe lo que piense de mi, no quiero que me alejes, que me evites y ni siquiera me des un minuto para explicarte... - Dice Wanda evitando que se le escapen unas lagrimas de sus ojos mientras se le quiebra la voz.

- ¡Ese es el problema Wanda dices que soy quien más te importa pero no evitas el herirme con lo que dices o haces, siempre soy yo quien tiene que entenderte pero... alguna vez tu te has puesto en mi lugar pensando que tal vez no quiero ser sólo tu mejor amiga! -

Diciendo esto último pude ver como la cara de Wanda se veía confundida y fue cuando entendí lo que había dicho, no era algo que pensaba decir pero por el enojo y el alcohol solo exploté y se lo dije, no me quedo más que correr hacia adentro de la casa e intentar evitar toparme con Wanda hasta que Pietro o alguien que conociera pudiera llevarme a mi casa, increíble día para decidir no traer mi auto.

No podía evitar sentir como si me hubieran arrancado el corazón y lo hubieran hecho trizas, sabía que Wanda no sentía lo mismo pero esta vez lo había confirmado eliminando por completo cualquier esperanza que tuviera de que fuera lo contrario y dolía tanto que solo quería irme y llorar, definitivamente el alcohol nos hacía decir la verdad, lastimosamente no era una verdad que quería que saliera de mi boca.

Sólo tenía dos cosas claras tenía que evitar cruzarme con Wanda y quería tomar hasta olvidar quien era.

Nuestro Pequeño Secreto / Wanda Maximoff (T/N)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora