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Narra Amon

Llegó a mi destino la manada Luna blanca, me habían informado que habían atacado a la manada y necesitaba saber que todo estuviera bien, me bajo del auto y me recibe el alfa y el beta.

-Rey alfa un gusto verlo, adelante por favor - dijo mientras ambos hacían una reverencia hacia mí, los tres nos adentramos hacia su casa y nos fuimos hacia su despacho, nos sentamos y yo empecé por lo más importante

-Alfa, como están las cosas, ¿hubo heridos, muertos, construcciones perdidas?- dije queriendo llegar al punto, no quiero quedarme mucho tiempo aquí, todavía no encuentro a mi mate y no quiero encontrarla, no la necesito

-Por fortuna no hubo muertes, solo tenemos el 25% de mis guerreros heridos pero ya todos los están atendiendo y están descansando, de las construcciones solo fueron daños leves, nada de qué preocuparse, ya están arreglando esos pequeños defectos, somos una manada muy fuerte y eso nos salva de tener muchos daños, gusta ir a ver la manada o ya mañana- dijo el alfa

-Mañana estaría perfecto, por lo mientras quiero descansar, estuve viendo todas las manadas vecinas- dije mientras me paraba de la silla

- Claro alfa lo que ordene, mi beta lo llevara a su habitación- el beta me dirigió hacia una habitación, y se despidió con una reverencia, entro a la habitación, se ve cómoda dejo mi pequeña maleta a lado de la puerta y camino hacia la cama, me siento me acuerdo y acabo dormido. Después de unas horas me despierto porque están tocando la puerta.

-¿Quién es?- pregunto mientras me estiro

-Soy la de servicio mi rey, gusta que le traiga la cena a su habitación o baja al comedor-

-Enseguida bajo- normalmente en mi manada como en el despacho por el exceso de trabajo, pero estoy en otra manada y no importa si soy el rey tengo que tener respeto, una vez saliendo de la habitación, bajo las escaleras y me voy al comedor llego y esta el alfa, la luna, el próximo alfa y su hija menor -buenas noches- me siento en un silla

-Rey que gusto que este aquí- me dijo la luna mientras los cuatro me hacían una reverencia, tomaron asiento y las del servicio nos empiezan a servir la cena, en toda la cena la hija menor no deja de mirarme, si estuviera en otro momento, me la tumbaría encima pero no puedo es la hija del alfa

-Mi rey, es un gusto tenerlo aquí-

-Gracias- le dije serio

-Me encantaría llevarlo a conocer la manada si me lo permite- me dice de modo coqueto, creo que nadie se dio cuenta de su tono

-Gracias pero ya es de noche y estoy muy cansado- una vez terminando me levanto doy las gracias y me voy a mi habitación, llegando me acuesto en la cama y me comunico con mi beta por el link que tenemos juntos.

~ link~

~Beta como están las cosas en la manada~

~Mi rey, entro una demonio a los limites pero la detuvimos a tiempo, ahora se encuentra inconsciente en los calabozos~

~Malditos demonio los odio, traten de alejarla de los niños no quiero muertes de ellos, me iré de aquí en cuando vea los desastres~

~Como ordene mi rey~

~Deja de decirme así, eres mi amigo, mi hermano de otra sangre, no tienes por qué decirme así Liam~

~Lo se Amon, nos vemos mañana~

~fin del link~

En ese momento tocan la puerta

-Adelante- dije mientras la puerta se abría dejando ver a la hija del alfa - que se le ofrece señorita, no tengo ganas de salir-

-Alfa, no vengo para salir con usted, pero podemos quedarnos en su habitación además, yo sé que no ha encontrado a su luna y necesita alguien que gobierne a su lado, yo podría ser esa mujer- dijo mientras se acercaba a mi seductora, no me había dado cuenta pero traía solo una bata de seda

-Mira no sé cómo te llamas y además no necesito una luna para gobernar, eh estado a cargo por 150 años y lo eh hecho bien, pero si gustas puedo hacer una excepción, necesito primero saber cómo eres en la cama para saber si eres digna de ser mi luna o no- dije mientras me acercaba a ella y tomaba su cintura, la verdad no necesito una luna solo me quiero acostar con ella, tiene un excelente un cuerpo y es muy hermosa, es lo mismo que le digo a todas, les prometo que serán mi luna y al final nunca cumplo, es algo cruel pero qué más da, hay algunas que incluso sin decirles falsas promesas, se lanzan conmigo.

- Soy Sara y vera que soy digna de ser su luna mi alfa- dijo mientras me besaba y me la lleve a la cama después de unos cuantos besos le quito la bata y me doy cuenta no traía nada abajo, es muy fácil, me quite yo la ropa y bueno la hice mía durante la noche.

AL DIA SIGUENTE

Me desperté y estaba Sara al lado mío, me metí al baño, me bañe salí con un toalla la rededor de mi cadera, tome mi ropa de la maleta y me la puse, me estaba terminado de arreglar cuando el link con mi beta se abrió

~Link~

-¿Amigo estas ahí?- su voz sonaba un poco preocupada

~Si aquí estoy, ¿Qué es lo que pasa?~

~Lo mismo de siempre, amigo es mejor que encuentre a tu luna, la manada cada vez se está poniendo más intensa, los problemas de fertilidad de las mujeres continúan~

~ ¿Qué les dices?~

~Que estas en búsqueda de nuestra luna~

~No sé hasta cuando se seguirán tragando esa mentira~

~Por qué mejor no tienes una compañera elegida, en lo que llega tu mate, sola para estabilizar a la manada~

~Creo que tienes razón~

Cerré el link me acerque hacia Sara y la desperté

-Sara es hora de que te vayas a tu habitación- dije mientras ella se despertaba

-Mi alfa, si seré la luna de su manada ya le demostré que soy una buena mujer para usted- dijo mientras se sentaba en la cama, maldita sea sigue con esa idea, bueno al final de cuentas necesito a alguien para tener de trofeo, esta me puede servir, es con la de mejor cuerpo con la que me acostado además es hija de un alfa es fuerte.

-Claro que si Sara, pero te parece que unas dos semanas veamos eso en mi manada, te estaré esperando- dije mientras le guiñaba el ojo - pero mientras vete a tu habitación, necesito resolver cosas con tu padre- dije mientas me alejaba de ella y me iba a la puerta pero su voz me detuvo

-Le dirás a mi padre que me escogiste como tu reina-

-No, todavía no es tiempo, tu les dirás no tengo tiempo para esas cosas - abrí la puerta y me fui de ahí.

Me fue de ahí antes de que se pusiera más intensa, me fui con el alfa para ver los desastres y a ver a los guerreros heridos, por suertes ya todos están casi recuperados, las ventajas de ser hombres lobo, estuvimos horas viendo toda la manada hasta que terminamos y nos fuimos a su casa, llegando me fui a mi habitación a recoger mi maleta, baje a la sale y ahí estaban toda la familia

-Alfa me tengo que ir, tengo cosas que resolver en mi manada- dije serio mientras me acercaba, voltee a ver a Sara y se veía muy feliz y emocionada, espero que no diga nada ahorita, no me la llevare ahorita

-No se preocupe mi rey, sé que hay cosas por resolver, le agradezco que haya venido a ver mi manada- dijo mientas me daba una reverencia

-Padre- hablo Sara, maldita sea me meterá presión para ser luna, no importa le diré lo que va a pasar una vez que ella llegue a mi manada.


NOTA:

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