Broken

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De tanto andar sin rumbo me topé con el borde del abismo. Debo reconocer que al principio caminaba alrededor de él, curioseando. Pensaba que encontraría algún tipo de luz en el camino, como quien encuentra un oasis en el medio del desierto después de divagar deshidratado. Estaba equivocada, yo lo único que hacía era adentrarme cada vez más en las tinieblas. Sufrimiento. Dolor. Una pesadilla. Experimenté a cada segundo la sensación de ahogo, como de no poder respirar, el pecho apretado. Yo no sabía hasta ahora, pero era mi corazón desmoronandose justo como un edificio viejo que necesitaba hace muchos años al menos un poco de cuidado. Y él.... Él era ese punto intermedio entre el amor más grande que había tenido y el dolor más intenso que jamás me habían causado.

MicrorrelatosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora