ONE-SHOT [Neji × tú]

La muerte

AU ninja:Las 5 etapas

Tan hace tan solo unos meses, ellos podían estar juntos, podían verse cuando quisieran, salir a pasear sin que alguien le recriminara algo a ella.

Todo era perfecto, estaba con él y él estaba con ella, planeaban un mundo perfecto, para ellos y, tal vez, no sé... para sus futuros hijos. Porque planeaban casarse sabían que el otro era su complemento.

La paz / El tormento
La suave lluvia / Una tormenta
La luna / La noche
Hombre / Mujer
Verano /Invierno
Día / Noche
El sol / Un eclipse
Frío / Caliente

Técnicamente ellos eran el Yin y el Yang. Si qué lo eran. Hasta ese día...

¿Que ocurrió? ¿Que paso? ¿Como? ¿En que momento? ¿Porqué?

No había sabía la respuesta, él pensaba que la conocía, que sabía todo de ella, la había visto llorar, reír, jugar, entrenar, caer y levantarse, la conocía de cualquier manera posible. Lo sabía todo de ella, hasta sus secretos más oscuros... eso, es lo que él pensaba, nunca se imagino que su novia tenía que irse de esa manera.

_____:Enserio, perdóname, porfavor –dejo caer el kunai–-. No me gusta que esto termine así, lo lamento tanto

Neji:No.. ¿como? Creí que al enterarte de la muerte de Itachi, no harías nada más, creí que te quedarías aquí.. conmigo -intensificó el agarre en sus muñecas-

____:Neji, entiéndeme, ya te di mis razones, no puedo estar en la Aldea donde mandaron a mi hermano a su infierno -sus lágrimas salieron-. Yo lo odie por muchos años, lo odiamos, pero.. nunca vimos cuanto sufría y todo por ¡esos malditos!

El Hyūga trago grueso, estaba en abismo, había atrapado a la traidora, pero esa traidora era su novia, la mujer que amaba.

No sabía que hacer, su novia o la Aldea, su amor o lealtad a su hogar.

Sabía las razones por las que ella se iba, quería entenderla, quería hacerlo pero, también quería cumplir su papel como un Jounnin de la Aldea escondida entre las hojas.

Con todo el dolor en su corazón, le dio la vuelta.

Neji:Uchiha ____ quedas arrestada por traición a nuestra Aldea -dijo colocandole las esposas-. Sabías la ubicación de Sasuke y nunca lo dijiste, intentaste matar a Danzō, al envenarlo, y, por último y más grave -trago con dificultad, aquel nudo en su garganta, dolía-. Dañaste nuestro amor