Capítulo 3: " Conociéndote"

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Joseph Desaulniers

Desperté y me quedé un momento quieto, hace mucho que no dormía tanto, me senté y me pasé las manos por el cabello para despertarme, miré a Aesop, pero no alcancé a contemplarlo, ya que se estaba despertando, se movió un poco entre las sábanas y cuando se sentó me quedé impresionado, ¿cómo puedes ser tan hermoso?

Aesop: Buenos días- te acurrucaste en mi pecho y me volví a acostar- ¿qué pasa?, ¿te molesté?- acaricié tus mejillas para calmarte. 

Joseph: ¿Cómo puedo molestarme cuando una belleza como tú me da unos buenos días tan hermosos?- me reí y bese sus labios, sus suaves y rosas labios- bueno, vamos a comprar las cosas que necesitas, y después  me dirás en que trabajas- me puse de pie y desayunamos juntos, y mientras yo me bañaba, él miraba unas cosas, y mientras él se bañaba, yo me arreglaba y miraba si tenía que llenar el tanque de gasolina del carro, pero creo que aún no es tiempo, está a tres rayas abajo de la mitad...

Aesop: ¿Ya estás listo?- me sorprendió, se arregló super rápido, y ya está listo.

Joseph: Si, mi amor- subimos y para que no evitáramos hablarnos, parqueé el carro y nos bajamos, si vamos a pasar tiempo juntos, prefiero que sea a pie.

Caminamos por la zona, aunque debo admitir que nunca había visto esta parte del lugar, hay muchas telas, demasiado brillo a mi gusto, pero veía la cara de Aesop y estaba fascinado e indeciso, lo abracé de lado y entramos a la primera tienda, Aesop miraba las telas y las tocaba, me sorprende como diferencia los diferentes tipos de telas, honestamente ni sabía que había diferentes tipos de telas, después de salir con dos bolsas grandes, seguimos con la brillantina, tanto brillo, demasiadas gemas, me salí del lugar y esperé afuera.

Aesop: La próxima avísame, hubiera preferido ir por esto primero, para que pasara rápido.

Joseph: Perdón Aesop- dejamos las cosas en el carro, y ahora si empezamos a pasar el tiempo juntos.  

Empezamos por almorzar, Aesop me llevaba escondiendo que tenía hambre, entiendo que le puede dar pena o que primero quería conseguir los materiales, pero debió avisarme antes, de todas formas, después de eso caminamos para conocer el lugar, hay muchas cosas que son bonitas, además de ropa hay adornos y ese tipo de cosas, cuando Aesop estaba mirando un collar, me acordé que debo darle el collar de mi madre cuando regresemos a casa. Después de caminar, encontramos un parque y nos sentamos a hablar.

Joseph: No sabía que eras diseñador, aunque las telas y lo brillante debieron darme una señal- se reía y yo me acosté en sus piernas- ¿y qué más te gusta hacer?

Aesop: Uy.. no sabría decirte, pues me gusta ver películas de terror, umm... a veces juego, ya sea en el teléfono o juegos de mesa...mmm...realmente no sé, pues me gusta mi trabajo, me gusta diseñar y dibujar- acaricié sus mejillas, eres muy interesante- ¿a tí que te gusta hacer?

Joseph: Pues me gusta tomar fotos, tengo una cámara y a veces simplemente me escapo del trabajo y me pongo a tomarle fotos a casi todo...mm, y ya, pues tampoco tengo muchas cosas que me gusten- Aesop me acarició la cabeza- harás que me duerma si sigues haciendo eso- me besó la frente y me senté-¿quieres hacer algo más o vamos a casa?

Aesop: Caminemos un poco y miremos que hay, pueda que nos perdamos de algo si nos vamos ahora- tomó mi mano y seguimos caminando, me encanta pasar tiempo contigo.

Aesop Carl

Mientras caminábamos, vi que había un bar, le dije a Joseph que entráramos y....era muy diferente a como me lo imaginé, tiene una temática de iglesia, las meseras están vestidas de monjas y debo admitir que tiene una excelente burla a la religión, miré a Joseph y sonreímos, nos sentamos en la barra y pedimos un trago suave, Joseph está manejando y personalmente no quiero emborracharme tan pronto.

Hablamos de muchas cosas más, por ejemplo como fue nuestra vida en la escuela, él tuvo muchos amigos, yo en cambio tuve solo dos porque era muy reservado y tímido, pero tuve buenos momentos con ellos, después de como fue la universidad, por cierto fui un desastre, me la pasaba fuera de casa con mis amigos, en algunas ocasiones llegaba borracho a mi casa, pero nunca a clases, tomaba algo para pasar la borrachera y sabía horrible, pero logré graduarme y con honores.

Después de ese rato regresamos a casa, llegamos casi anocheciendo, acomodé las cosas en el salón para mañana seguir trabajando y le escribí a una de mis clientas para que pueda venir mañana y tomarle las medidas, pausé un momento mi trabajo mientras me mudaba, ahora ya puedo seguir.

Joseph: ¿Te ayudo a acomodar algo?- quiero que sea sorpresa para él...

Aesop: No, descuida, yo puedo hacerlo- tomé rápido la bolsa- quiero que lo veas mañana, además es mejor cuando estoy trabajando- y cerré rápido la puerta, aprovechando que estaba dentro, acomodé unas cosas para que no se viera tan desordenado, no quiero que crean que soy así- listo.

Fui al cuarto con Joseph y me dio sueño de inmediato, me acosté, besé a Joseph y caí rendido, aunque admito que fue un buen día.

Hasta el próximo capítulo....

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