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Aunque parecía que solo me interesaba estar jugando sin hacer nada. La verdad estaba pensando en alguien en específico, Rei Miyoshi. Mi ex novia. Hace 9 meses que no se nada de ella, se cambio de instituto, perdí contacto y Reo también. Y ahora, Ryo Miyoshi, es extraño cuando lo vi a los ojos, juré ver a Rei. A mi no me engañas, te voy a quitar la máscara.
— Oye Nagi — llamo Zantetsu — hoy te fuiste en pleno entrenamiento.
— Si. Me había cansado — mentí. Bueno un poco, la verdad si me dio pereza pero en cierta parte, me desanimé al recordar a Rei.
— ¿Sabes una cosa? Si te saltas los entrenamientos, el ácido láctico de tus rodillas se convertirá en glucosamina — eh? No entendí pero tampoco quise entender — lo dije bien? — pregunta.
— Eso parece, si — respondí sin saber a que se refería.
— Que tonto eres, Zantetsu. Nagi no necesita entrenar... — se unió Reo a nuestra "conversación".
— Reo, siempre lo consientes en todo — escuche decir al cuatro ojos.
— Por supuesto — afirmó Reo — porque es mi tesoro — confesó.
Observe a Reo y esa mirada al parecer esta sumergido en pensamientos. Lo se porque también suelo ser así.
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Estábamos jugando con la cara de Bachira, tratando de adivinar.
— Esa cara es de: "¿Podemos ganar?" — apunto Isagi.
— Es de: me duele la barriga! — gritó bakarashi.
— Es de: ¿Como esta mi abuela? — pregunta con tranquilidad Gagamaru.
