Capitulo Dos

63 11 1
                                    

Capítulo Dos

Luca

Cuando por fin llegué a Los Ángeles no esperaba que mi noche tuviera exactamente el desenlace que tuvo, ir a la fiesta de mi odioso primo y ver como abusaban de una chica no estaba ni de cerca en mis expectativas de la noche.

Odiaba a los abusadores.

Así que no dude ni dos segundos en sacar mi glock, ponerle el silenciador para no armar un gran alboroto en la fiesta y dispararle directo a la cabeza. El malnacido estaba ignorando sus lágrimas y sus quejas, se creía demasiado poderoso.

No le dí la suficiente atención al asunto y quizá por ese motivo traume a la joven chica que quedó debajo de su cuerpo y sangre... Pero esa preciosidad lejos de traumarse por aquello, pareció disfrutarlo, lo vi en sus ojos y condenenme por eso, pero me puso duro como una roca.

Luego de haber pasado hablando con esa chica durante unos cuantos minutos, finalmente termina yéndose rodeando el jardín trasero aún con mi saco sobre sus hombros. La observó subir unas escaleras de servicio que se dirigen al primer piso de la casa.

Sacó del bolsillo de mi pantalón la cajetilla de mis cigarrillos, me llevó uno hacia los labios y lo enciendo antes de darle una profunda calada. Mis pensamientos sin autorización se dirigen a la hermosa chica con la que he interactuado. Me considero un gran catador de bellezas femeninas, me gusta apreciar las vistas que nos ofrece la vida y quizá ir más lejos a donde los cuerpos se unen si es permitido. Pero con los años que tengo, una chica jamás me cautivo tan rápido con su belleza como esta chica en particular.

Su piel es algo bronceada, tiene ojos grandes con forma almendrada y de un color verdoso muy llamativo, labios carnosos y rosados que te invitan a querer besarla, pequeña nariz respingada que queda muy preciosa para su rostro y su cabello es largo y castaño oscuro, cae sobre sus pechos hasta un poco más abajo. Llevaba un vestido ceñido que aunque le quedaba muy bien y resaltaba sus curvas, no encajaba del todo. Pero esa mujer era un sueño.

Al inicio se me hizo un poco conocida cuando la vi, luego, cuando mencionó el evento de hace un par de meses, la recordé. Habíamos coqueteado bastante y había querido ir un poco más lejos, pensé que se iría conmigo pero no la había vuelto a ver por la noche luego de que su padre la llamara. Algo en su mirada había cambiado, esa noche la recuerdo brillante, llena de luz y ahora encontraba una mujer sin mucha esperanza, destruida. Pero aún así, hermosa.

-Señor Salvatore. -Me llama Elliot, mi jefe de seguridad y un gran hombre de confianza para mi.- Nos deshicimos del cadáver, la escena quedó limpia. ¿Quiere que mandemos algún mensaje a la familia?
-No, a la familia no. -Digo dando una nueva calada. -Cortenle la polla y envienla a la oficina de Dante en mi empresa y escribe una nota
"Ten cuidado con quien toca a tu chica."
-Señor si me disculpa...-Me dice y yo lo miro con atención. -El podría tomar represalias contra la jovencita pensando que fue ella o algo así.
-Es verdad, no vamos a meterla en problemas. "Si veo a otro hombre tocar a tu mujer sin su consentimiento, las próximas serán las tuyas". -Le digo antes de mirarlo nuevamente, lo veo mordiendo su labio intentando reprimir una sonrisa. -¿Qué?
-Esa chica parece haberle importado.
-Odio a los abusadores.- Me excuso. Si me importa la chica, pero no lo voy a admitir. No ahora, al menos.
-Y la chica era una preciosidad. -Me contesta y eso me molesta inmediatamente. ¿Qué me sucede?
-No la mires. -Ladro.
-Solo lo decía. Es una chica preciosa. Lastima que pertenece a su primo Dante.
-Si yo quisiera, podría tomarla. Soy el puto jefe de esta jodida familia y cada cabeza que habita aquí esta bajo mi cargo, todos me pertenecen.

Él asiente y se queda en silencio a un lado mio mientras yo termino de fumar mi cigarrillo, intento decidir si fumar otro o regresar a la fiesta. Mi padre me dejó a cargo hace cinco años, casi seis, pero previamente trabajé duro para poder conseguirlo.

Wicked GameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora