Aún Te Amo...

Vacío

El ambiente dentro de aquella habitación se hacía cada vez más denso.. o al menos eso le parecía al omega que se encontraba sobre la cama en aquel lugar.

Miraba de un lado a otro, revisaba cada detalle en las paredes, en los muebles, en el piso... nada, no lograba reconocer nada.

Su instinto le hizo aspirar con fuerza para tratar de llenar sus pulmones de aire a su totalidad, pero por más que lo hacía... seguía sintiendo un hueco en medio de su ser.

Se observó a si mismo sobre la cama, recorrió con sus ojos sus extremidades, las cuales se encontraban perfectamente extendidas sobre aquél mueble de hospital.

Un miedo le invadió de pronto. Poco a poco llevó sus manos hacia sus muslos, temiendo con suma angustia no sentir su cálido tacto.

Un suspiro escapó de sus labios al posar sus manos sobre sus piernas y sentir perfectamente su piel.

Se propuso mover un pie. 

Una leve sonrisa escapó de su boca cuando logró el movimiento en ambas extremidades.

Ahora intentó doblar una pierna. Lo logró sin problemas.

Miró alrededor de la habitación buscando una puerta cuando la sensación de orinar le llegó de pronto.

Tenía que bajar de ahí, debía ir a hacer sus necesidades. 

Con cuidado llevó sus piernas a la orilla de la cama, bajó una.... luego la otra. Una sensación de regocijo le puso la piel de gallina cuando sus pies descalzos lograron tocar el suelo. Era frío... pero era reconfortante.

Tomando un poco de impulso, se sujetó del barandal superior de la cama de hospital y quiso ponerse de pie.

-¡Oh!- exclamó al verse de pie pero inmediatamente comenzar a marearse, tambaleándose por completo.

Su cuerpo comenzó a caer hacia lado contrario de la cama. El omega cerró los ojos resignado a su caída, pero cuando fue consciente de que impactaría contra el suelo.... el impacto nunca llegó.

Se vio sujeto por unos brazos que de inmediato le ayudaban a incorporarse y le arrastraban hacia la cama.

-¿Está bien?- le preguntó aquél joven que con sumo cuidado le sentó en el colchón y le ayudaba a recostarse sobre el respaldo erguido de la cama. -Su sentido del equilibrio puede estar un poquito afectado por el tiempo que ha pasado en cama. Lo correcto es que se tome un tiempo antes de ponerse de pie.- le platicaba mientras le subía las piernas a la cama.

-¿Qui..en...?- quiso preguntar el omega apenas con un dejo de voz, sus cuerdas vocales tampoco se encontraban en perfecto estado.

-¿Quién soy yo?- le contestó al mismo tiempo que extendía la sábana sobre las piernas del omega y pasaba hacia su respaldo para acomodarle su almohada. -Soy Seokjin y voy a cuidarte..

-Seo..Seok..- el omega trataba de pronunciar aquel nombre pero por alguna razón que desconocía, sus sentidos se encontraban un tanto bloqueados... algo en su estómago se removió.

-Seokjin, si. Yo voy a cuidarte si?- le repitió cuando terminó de colocarlo en buena posición en la cama. -Voy a cuidarte... y a ayudarte...- le dijo mirándole a los ojos.

-Jae...jaeh..- intentaba decir llevándose la mano a su pecho.

-Jaehwan.

El omega afirmó con la cabeza.

-Bien. Tienes que comer algo, me dijeron que no comiste bien. Necesito que estés fuerte. Voy prepararte una sopa si?

El omega volvió a contestar con un movimiento afirmativo de cabeza.