Atardecer

1.2K 141 0
                                    

Por fin habían podido compartir tiempo durante esa semana, además de volver a patinar juntos, estaban preparándose para los exámenes finales, lo que les permitía compartir todo el tiempo posible tanto en la escuela como fuera de ella.

Era viernes por la tarde y Sunghoon lo había invitado a quedarse en su casa, planeaban terminar el drama que estaban viendo juntos, era una idea bastante cómoda.

Compraron tteokbokki camino a casa y lo primero que hicieron al llegar fue sentarse juntos a cenar, no había nadie en casa, Yeji seguía en su academía, y sus padres iban a asistir a un evento del trabajo, todos llegarían tarde.

-Es genial que no saliéramos hoy, quería ir al karaoke con los demás pero me siento cansado- hablaba Sunoo mientras comía, amaba el tteokbokki.

-Al menos evitamos escuchar a Jake y Jay cantar en inglés.

-Pero ellos si hablan inglés.

Y hasta donde se había dado cuenta, cantaban bastante bien.

-Si, por eso me da envidia.

Después de cenar subieron a su habitación, Sunoo buscó y reprodujo el episodio mientras Sunghoon acomodaba algunas almohadas en su cama, se sentó con la espalda sobre éstas y Sunoo se acomodó en medio de sus piernas para que pudiera abrazarlo desde atrás, le gustaba sentarse de esa forma con Sunghoon, se sentía mimado.

Después de que terminó el capítulo que estaban mirando, Sunoo tomó valor para preguntar en voz alta algo que llevaba pensando los últimos días, tenía suficiente confianza en Sunghoon pero no podía evitar el sentirse tímido.

-¿Sunghoonnie?

-¿Uhm?

Dió un largo suspiro -¿De verdad quieres besarme?

A Sunghoon le tomó unos segundos procesar su pregunta.

-Si.

-¿Quieres hacerlo ahora?

-No tenemos que hacer algo que no quieras.

Era lo que Sunoo necesitaba escuchar para sentirse seguro de lo que había decidido, giró para quedar frente a él y se sentó sobre sus talones.

Sunghoon sentía la expectativa del momento, era consciente de sus propios latidos, las palmas de sus manos estaban sudorosas y lo único que podía hacer era esperar, incluso tenía miedo de moverse y arruinarlo.

-Cierra los ojos Sunghoonnie.

-Ya fui engañado antes con ese truco- cruzó los brazos sobre su pecho y no cerró los ojos.

-Yah, pero te prometo que está vez no estoy jugando.

Cerró los ojos y sintió las manos frías de Sunoo tomar su cara, pudo percibir cómo acercaba lentamente su cara hasta poder sentir su respiración mezclarse con la suya y entonces hubo una presión sobre sus labios, había sido breve pero también había bastado para hacer que todos los nervios de su cuerpo reaccionaran.

-¿Ya puedo abrir mis ojos?- preguntó con el tono que usaba para molestarlo, Sunoo aún mantenía sus manos sobre sus mejillas, sosteniéndolo.

-No, aún no los abras.

Y entonces volvió a besarlo, sólo que está vez era un beso mucho más largo, uno en donde ambos participaron.

Sunghoon solía admirar mucho la faceta mandona de Sunoo, en dónde él lideraba detrás de esa cara angelical que tenía, era un chico que sabía bien obtener lo que quería, dudaba que él mismo se diera cuenta de su poder.

Se separó de él, lo miró y estaba seguro de que en ese momento era la persona más feliz en el mundo, Sunoo tenía las mejillas coloreadas de rojo y una sonrisa casi tan amplia como la suya. Lo atrajo hacia él y Sunoo pasó sus brazos sobre sus hombros, se miraron fijamente durante un pequeño momento antes de juntar sus labios de nuevo.

-¿Cómo se supone que voy a vivir ahora?- le dijo Sunghoon haciéndolo reír ya que en medio de cada palabra había interrumpido su oración para darle más besos en la cara.

-Fue divertido- observó Sunoo después de recuperar su respiración.

-Mucho, hagámoslo de nuevo.

Sunoo trató de detenerlo en medio de risas, era obvio que no iba a bastarle. Sunghoon lo empujó hasta que quedó acostado y se acomodó sobre él tratando de no aplastarlo con el peso de su cuerpo -¿Si?

Sabía que si le decía que no se detendría y eso movía mucho su corazón porque ¿quién no quiere a alguien que haga sólo lo que te hace sentir cómodo y feliz? -Si quiero.

Sunghoon se acercó a su boca y volvieron a besarse, no quería dejar de hacerlo jamás.

Una vez que sintieron sus labios cansados, y que Sunghoon se cansó también de sostener su propio peso, por fin se separaron y volvieron a acomodarse en la posición que estaban antes, calmaron sus respiraciones y continuaron viendo la televisión hasta que el último episodio terminó.

-Por un momento creí que no tendrían final feliz.

-Yo siempre tuve fé en que él querría casarse pero tardó mucho dándose cuenta.

-¿Verdad? que desesperación.

Ambos intercambiaron miradas y estuvieron unos minutos en silencio hasta que Sunoo bostezó.

-Creo que deberías dormirte ya cariño.

Sunoo asintió en acuerdo, ambos se levantaron y tendieron las mantas en el suelo, no tenía sentido discutir con Sunoo pidiéndole que durmieran juntos, lo había intentado un par de veces y se llevó un sermón muy grande sobre límites e inseguridades. Al menos lo había convencido de tomar la cama y dejarlo a él en el suelo.

-Buenas noches novio- rió después de su propio comentario -se siente raro llamarte así.

Sunghoon podía imaginarlo sonrojandose.

-¿Raro malo?

-No- su voz cada vez era más somnolienta.

-¿Sunoo?

-Yo también te quiero, buenas noches.

Se había vuelto una rutina interrumpirlo, pero al mismo tiempo era lindo que también se lo dijera.

Sunshine (sunsun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora