𝐼'𝑚 𝑙𝑜𝑠𝑖𝑛𝑔 𝑚𝑦 𝑚𝑖𝑛𝑑 • 𝑆𝑜𝑜𝑗𝑢𝑛

02

Después de un largo primer día de escuela, Soobin estaba recostado sobre su cama, muriendo de aburrimiento mientras miraba el techo, esperando que lo llamaran para cenar, como cada día. Una aburrida rutina que estaba cansado de cumplir siempre. Apenas estaba cerrando los ojos cuando escuchó un golpesito contra su ventana, confundido movió suavemente la cortina asomándose, viendo a Yeonjun afuera quien al verlo asomado movió eufórico la mano saludandolo. — ¿Yeonjun? — Suspiro un poco confundido y abrió cuidadoso la ventana asomándose nuevamente. — ¿Qué pasa? ¿Qué haces aquí?

— ¿No es obvio? Vine a verte, sal, vamos a algún lado. — Gritó desde abajo Yeonjun, mientras que Soobin le hacía señas para que bajara la voz.

— Ya voy. — Suspiró pesado cerrando nuevamente la ventana y luego saliendo de su habitación para bajar silencioso, sin despertar a su abuela, la única que se encontraba en casa; en cuanto salió Yeonjun lo saludo caminando hacía el. —¿Y a donde iremos?

— A dónde sea. — Comenzó a caminar esperando que Soobin lo siguiera, recibiendo solo una queja del más alto.

— Me levanté para nada, si no sabes a donde ir mejor me regreso a dormir. — El contrario solamente se rió volteando a verlo y tomando su muñeca suavemente para empezar a caminar.

— Eres un berrinchudo, Soobin — Dijo en tono burlón. — Vamos a la playa a ver el atardecer y luego a mi casa a comer algo o yo que sé. — Soobin solo suspiró siguiéndolo, hasta llegar al lugar; una vez ahí, solamente se sentaron a mirar el mar y el cielo. — Este será nuestro lugar desde ahora. — Murmuró Yeonjun volteando a ver a Soobin, quién a su parecer, se veía realmente lindo con el sol dándole en el rostro de forma suave y el cabello levemente despeinado por la suave brisa.

— ¿"Nuestro lugar"? ¿Es porque aquí nos conocimos? — Miró algo confundido a Yeonjun, el cual solo asintió levemente sonriendo y recargando su cabeza sobre su hombro.

— Además es lindo ¿No crees? — Miró de reojo al rubio sonriendole levemente, el cual solo asintió, extrañamente se sentía comodo así con Yeonjun, sentía una paz extraña al tener a Yeonjun cerca.

Soobin giro suavemente su rostro encontrándose con los lindos ojos marrones de Yeonjun. — Lo es... — Susurró bajito pero lo suficientemente alto para que Yeonjun escuchará, sin saber si se refería al mar o a los ojos de Yeonjun.

— Realmente lo es. — Pasó su mano a la nuca de Soobin acariciando suavemente su cabello; el pulsó de Soobin empezó a acelerarse, sintió sus manos sudar un poco, ¿Porque se sentía así con un chico? Tal vez era porque era atractivo que le ponía nervioso. Soobin es hetero, más no ciego. — Podría mirarlo todo el día, todos los días, no me cansaría. — Sin que Soobin se percatara, Yeonjun ya estaba a muy pocos centímetros de sus labios.

Pero cuando parecía que estaban apunto de besarse, Soobin se dió cuenta y se alejó bruscamente, tomando su pecho y apretando su camisa, tratando de calmarse y buscarle una explicación a sus latidos acelerados y sus mejillas rojas y calientes. — No hagas eso Yeonjun. — Tragó saliva mirandolo otra vez.

— Lo siento, no fue intencional. — Dijo Yeonjun soltando una risita mientras que llevaba su cabello hacía atrás volviendo a mirar el mar, restándole importancia a lo que antes sucedió, mientras que Soobin volvía a mirarlo, quedando cada vez más convencido de que Yeonjun era el chico más lindo que habia visto. —  Vamos a mi casa. — Sugirió de la nada sacando a Soobin de sus pensamientos.

—¿Ahora? — Yeonjun asintió, el rubio lo pensó un poco pero al final asintió, ambos se levantaron y comenzaron a caminar. —¿Y que haremos? — No respondió, solo continuo caminando hasta llegar.

— Entra. —Dijo sonriendo mientras entraba primero el, la casa estaba sola, como de costumbre. — ¿Quieres comer? Puedo cocinar algo, o podemos subir a mi habitación.