𝐊𝐨𝐨𝐤𝐦𝐢𝐧 | 🖤𝐃𝐨𝐥𝐨𝐫𝐨𝐬𝐨 𝐒𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨🖤

𝐏𝐚𝐫𝐭𝐞 𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥

Semanas después;

—Jimin, necesito hablar contigo.—dice el jefe del rubio entrando a la oficina de este–

—se levanta de su asiento haciendo una reverencia—dígame jefe, ¿de que quiere hablar conmigo?—pregunta Jimin—

—siéntate porfavor—pide el jefe y Park asintio—he decidido que Jungkook será el nuevo jefe de esta empresa.

—¿Que dice?—pregunta incredulo Jimin—¿Pero por qué?.

—Jungkook ha trabajado muy duro todos estos años en esta empresa y ha demostrado ser digno de tener mi puesto–explica el jefe y Jimin empuña sus manos–

—Mi esposo se merecía el puesto—dice duramente Park—Hoseok merecía este puesto, el trabajo muy duro todos estos años para usted, hacia trabajos que no le correspondían, se quedaba horas extras aquí, ¿y para que?, para nada, el espero ansioso ser nombrado el nuevo jefe de esta maldita empresa, y nunca le dio la oportunidad de serlo—escupe el rubio con molestia y tristeza—murió sin serlo, usted dijo que nadie era digno de tener su puesto, ¿que cambió ahora?, ¿la muerte de mi esposo acaso?

—Jimin...Hoseok era un gran trabajador pero no tenia potencial de tener mi puesto–responde el hombre—

—¿Que dice?, ¿no tenía potencial?, ¿pero que carajos esta diciendo?, Hoseok era el mejor trabajador de esta estúpida empresa, entró mucho antes que Jungkook, ¡el merecía el maldito puesto!—grita Jimin acercándose a su jefe—no estoy diciendo que Jungkook no se lo merezca, el ha sido un buen trabajador, lo reconozco, pero...no puedo aceptar que después de la muerte de mi esposo haya cambiado de opinión cuando el siempre estuvo allí para usted, siempre, que decepción me da—lágrimas bajaban por su rostro—Hoseok no se merece esto...aun estando ya muerto...el no se merecía esto

Jimin deja solo a su jefe saliendo de su propia oficina, sus lágrimas no paraban de bajar por sus mejillas, caminaba con desespero hacia la azotea de la empresa mientras sus compañeros de trabajo lo observaban curiosos y preocupados.

Al estar en la azotea, soltó un grito desgarrador, el dolor seguía ahí, en su corazón, aquel dolor que no lo dejaba dormir. Su esposo no se merecía esto, por supuesto que no, el más que nadie en el mundo sabía lo cuan ansiado estaba Hoseok por ese puesto.

El más que nadie sabía lo mucho que se desvelaba Hoseok en terminar todo su trabajo e incluso trabajos que no eran de el, con tal de ser ascendido a un puesto mucho más elevado. Lo mucho que lloro Hoseok cuando el jefe dio la noticia que nadie era digno para poseer su puesto y hacerse cargo de la empresa.

Podría sonar egoísta por no sentirse feliz por el gran logro de su ahora pareja Jungkook, pero no podía simplemente ignorar la injusticia que se estaba cometiendo, apesar de que su esposo ya no estuviera vivo. Pero el quería pelear lo que le correspondía a Hoseok. Estaba feliz por Jungkook, pero no se asemejaba a la decepción que sentía, aquella furia que sentía al ver como siempre aún estando muerto Hoseok lo ignoraban y se olvidaban de él como si fuese un libro del cuando pueden necesitar una vez y la mayoría de veces lo dejan tirados olvidándose de ellos.

—Hobi....perdóname por no poder hacer nada—solloza Jimin—amor mío...¿por qué no pude despedirme de ti?, ¿por que tuvimos que pelear esa noche?....¡Porque maldita sea!—grita—

La culpa lo envolvió de nuevo, aquella que no podía zafarse de su corazón y mente. Aquella duras palabras que le dijo a su esposo antes del accidente habían triturado su alma y corazón. El nunca quiso decir aquella hirientes palabras.

—sabes que no quería decir eso—solloza Jimin—¿lo sabes verdad?, no quería decir eso, no quería decirlo....no quería que te fueras, no quería que estuvieses enojado conmigo....yo...no debí haberte dejado ir