Era un día como cualquier otro en la casa de los Heeler. Todo estaba relativamente bien, excepto porque Chilli se encontraba despierta desde temprano en la madrugada debido a que sentía un agudo dolor en el vientre. Bandit se encontraba en el trabajo, así que no había nadie con ella para que le pudiera ayudar.
"Me duele mucho el estómago"
Chilli decidió entonces que llamaría a una ambulancia para que la llevara al hospital, pero después de solicitar la ambulancia, el dolor se hizo tan agudo que terminó por desmayarse y con una última muestra de fuerza, logró abrir la puerta de la entrada, para que los paramédicos no le rompieran su puerta que tanto le gustaba.
"Mi bebé, estará bien?"
Bandit estaba realizando un papeleo mientras tarareaba una alegre canción de cuna, estaba muy emocionado por la idea de tener a su primer hijo con el amor de su vida, cuando de repente sonó su celular.
-Buenas tardes, quien habla?- Preguntó, ya que era un número extraño.
-Buenas tardes, estoy buscando al señor Bandit Heeler. Estamos hablando desde el hospital.- Respondio el enfermero.
Toda la felicidad que tenía en el rostro se desvaneció en cuanto le dijeron la razón de la llamada que acababa de recibir. Su jefe que estaba justo entrando para comentar algo respecto al trabajo cuando colgó. Vió la expresión aturdida de Bandit.
-Que pasó señor Heeler? Todo en orden?-. Preguntó su jefe
-No, nada está bien. Acabo de recibir una llamada del hospital. Mi esposa... me dijeron que ella llamó porque se sentía mal, tenía un agudo dolor abdominal, para cuando llegaron, la encontraron desmayada frente a la entrada.- Bandit no quería continuar. Su amada Chilli.
-Y que le informó el médico sobre el estado de salud de su esposa?- Preguntó el jefe
-Me dijo que ella... que ella sufrió un aborto espontáneo-. Dijo al fin. Decir esas palabras le hacían sentir como si lo hubieran apuñalado en el estómago con un cuchillo al rojo vivo.
-Señor Heeler, vaya con su esposa, de hecho yo mismo lo voy a acompañar, tómese los días necesarios para reponerse mentalmente.- Le respondió el jefe.
-Gracias- dijo Bandit. "Oh Chilli, no lo puedo creer, desearía que fuese un chiste de mal gusto"
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No Fué tú culpa
FanfictionBandit y Chilli tienen que sobreponerse a un doloroso acontecimiento