¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Los rayos del sol se colaban por la ventana de la habitación, dando en el rostro de Build quien se encontraba aún dormido.
Poco a poco despertó, tratando de enfocar su visión para recordar dónde se encontraba, al hacerlo, los recuerdos de la noche anterior le cayeron como un balde de agua fría.
Aún tenía la sensación en su piel de las firmes manos de Bible recorriendo cada parte de su cuerpo y besando este a su paso.
Al estar totalmente despierto, se levantó lentamente quedando sentado en la cama, la sábana que cubría su cuerpo cayó en su regazo, dejando a la vista las marcas que Bible había dejado.
Lo cuál le sorprendió y preocupó, ya que no fue consciente de que a la mañana siguiente éstas se notaran tanto, se calmó al pensar en la solución de que estarían cubiertas por el traje de boda.
La habitación se encontraba en total silencio, a excepción del bullicio de la gente que entraba por la ventana que daba a la calle.
Build volteó a ver al otro lado de la cama, esperando encontrar a Bible aún dormido.
Aunque fue todo lo contrario, el otro lado de la cama se encontraba vacío y en perfecto estado, muy diferente del suyo que estaba con la almohada desarreglada.
Soltó un suspiro y se pasó las manos por la cara espantando el sueño que aún lo tentaba a dormir más.
Se acercó a la orilla de la cama, permaneciendo un buen tiempo en esta mirando a la nada, pequeños flashback volvían a su mente por lo antes ocurrido, causándole una gran confusión en sus pensamientos.
Pero volvió a la realidad al sentir un gran dolor en su parte baja y cadera al intentar levantarse de la cama.
— Maldición — murmuró apretando los dientes, sentándose nuevamente en su lugar — ¡Agh, Bible! — maldijo internamente al contrario, en verdad no había tenido piedad con su pobre cuerpo.
Build estaba consciente de que esta había sido su primera vez, así que no sabía qué hacer.
Mirando alrededor, su vista fue a parar a una mesita cerca de la cama, en la cuál se encontraba la caja con los anillos de compromiso.
Nuevamente intentó levantarse para alcanzarlos, pues a lado de estos estaba una hoja de papel, pero se dio cuenta que aún se encontraba desnudo y la delicada sábana era lo único que le tapaba.
Con mucho esfuerzo tomó su ropa, la cuál se encontraba a los pies de la cama, y aguantando el dolor de su cuerpo, se la puso.
Su vista volvió a parar a la mesita, ahora también pudo divisar un vaso de agua y una pastilla.
Tomo el pedazo de papel y leyó el contenido de este:
"Toma la pastilla que dejé a lado del vaso con agua, te ayudará con el dolor"
