"Eres Mía" / "¿Te quedarás conmigo?"

Capítulo 1

16 años ántes de que Elric Rister sea el rey de "Fóinix".

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Mirna: Lo siento, hijo, pero tienes que casarte. Es tu deber como príncipe y debes traer herederos para el reino, y el linaje real.

Elric: Creí que aun tenia tiémpo. -suspiró- Además, detesto a Clarisa, es patética y solo habla de élla mísma.

Mirna: Lo sé, pero sera tu esposa y tendras que empezar a soportarla.

Elric: Ahhh...de acuerdo. Como digas, madre. -caminó hasta la puerta-

Mirna: ¿A donde irás?

Elric: No lo sé todavía, pero volvere antes del anochecer.

Mirna: ...Esta bien.

Cuando cruzó la puerta la reina Mirna solo suspiró, lo ciérto era que le costaba mucho obligar a su único hijo a hacer algo que no quería.

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Elric no sabía que hacer, lo ciérto es que ya sabía que la hora de su compromiso estaba acercándose, pero creía que al menos lo dejarian escoger a su esposa, pero no seria así y ahora estaba atado a una verdadera serpiente venenosa.

Elric: Levantense muchachos, saldremos.

Elmer: ¿A donde, mi príncipe?

Elmer era el jefe de su guardia, y de confíanza, sin dudarlo dejaria su vida en sus manos.

Elric: Aún no lo sé.

Cuando abrieron las puertas del castillo el príncipe Elric salió junto a sus guardias, estaba por enviar a algunos de sus hombres a las caballerisas y salir a montar, pero cuando miró hacia una parte cerca del castillo notó a una joven que se encontraba alimentando al ganado. Era bonita, piel blanca como la leche y su cabello era negro, a sus ojos era realmente...hermósa. Y solo se habia sentido así por úna mujer.

Elric: Elmer, ¿quién es élla?

Elmer: Es Hera, la cocinera del castillo.

Creyó que hablaba de la jefa de cocina que le estaba dando órdenes a la joven de cómo alimentar a cada animal.

Elric: Elmer, tal vez a tí te gusten las mujeres mayóres, pero me refiero a la belleza junto a élla.

Ante las risas de algunos de sus compañeros guardo silencio por unos segundos.

Elmer: Si no me equivoco se llama Esmeralda, fue sirvienta de su madre, la reina.

Elric: ...Ya veo. Entonces no me equivoqué.

Caminaron hasta ellas lo cuál puso a sus guardias curiosos del "¿porqué?" iban hacia éllas.

Hera: ¡Mi príncipe! -se inclinó- Que gusto verlo.

Elric: Buenos días, Hera. -miro hacia la joven- Pero dime, ¿que hace élla aquí?

Hera: Oh, claro, Esmeralda. -le hizo una leve seña a la joven para que se acercára- Comenzará a trabajar como ayudante en la cocina del reino, mi príncipe.

Esmeralda: Es un placer volver a verlo, mi príncipe. -se inclinó levemente-

En ese momento el príncipe Elric hizo algo que sorprendio a todos, tomo la mano de la jovencita y besó su dorso.