Capitulo 3

9 4 0
                                    

Recuerde votar si le gusta

........

Llevo ya una semana aquí y las cosas cada día son más normales, lo cual no se si me ilusiona o me desanima. Había encontrado un propósito a lo Indiana Jones, y resulta que eran todo delirios míos, como se nota que no has ido a un convento en tu vida.

Lo único que sigue sin cuadrarme es lo de la chica del primer día, pero se acabó hoy me largo definitivamente. 

Hoy pienso investigar por la noche, ver si hay alguna salida, o si encuentro algo que consiga que me echen a patadas. Es sábado por lo tanto solo tengo que ir a misa, cosa que voy a hacer, la iglesia esta a unos treinta minutos, lo único que tengo que hacer después es esconderme y quedarme esperando a que empieza la del exterior, con suerte encontraré a alguien manipulable al que pueda convencer de que aquí nos drogan o que es una secta.

Me pongo el uniforme y salgo por la puerta de la habitación para petar en la de Rose, al tercer día aquí me di cuenta de que enseñando mi carácter solo conseguía que todas me vigilaran desde cerca. Ninguna de mis compañeras se interesaban por mi, algo nuevo ya que en los otros internados llamaba mucho la intención, aquí lo mejor es esconder tus pensamientos, en resumen fingir ser una persona que no eres para que empiecen a confiar en ti y después dar el golpe, apuñalandolas por la espalda.

En otra vida podría haber sido actriz porque me monto muchas películas y se me da bien fingir, eso sí, aún no se si eso es bueno o malo, pero supongo que bueno mientras que me ayude.

Rose tarda contados seis segundos en abrir la puerta y parece sorprendida cuando me ve, uhmm a quien esperabas Rose.

-Buenos días Pandora.- saluda.

-Hola...¿es mal momento o es que esperabas a alguién?- digo poniendo una cara apenada, fingiendo ser más inocente que la mismísima virgen María.

-Ahhh, ¿no porque piensas eso?- dice jugando con sus dedos, y según mi historial policial base a la experiencia, significa que está mintiendo, la verdadera pregunta es ¿por qué? ¿No es eso pecado Rose?

-Por nada, solo que parecías desilusionada.- digo encogiendome de hombros.- será cosa mía.- murmuro de manera que le sea audible.

Muchos dirán que soy una zorra por hacer cosas así, para mí, es ser astuta, ahora seguro que se reconcome por dentro por el echo de que sé oculta algo, si es que lo hace. Al fin y al cabo el hecho de que tener tantos incidentes y escapadas va a servir para algo.

-¿Cuando nos vamos?- pregunto.

-Después de desayunar, pero pensé que no eras cristiana.

-Es que estar en un sitio tan puro me a hecho cambiar de idea, ahora me siento súper interiorizada con la religión, muy metida y eso.

-Que bueno, me gusta que te adaptes tan rápido, ¿no ves lo bien que esta este sitio? Y eso que no pretendías quedarte.

-No se como pude pensar algo así, que giros da la vida ¿no?- me labios se tuercen en una sonrisa torcida.

....

Tan pronto como vislumbro la iglesia mi boca se abre de par en par, esto está petadisimo. No pensé que un iglesia de un pueblo tan pequeño estuviera tan llena, tampoco es pequeña que se diga.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 10, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

SINSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora