𝓒𝓪𝓹𝓲́𝓽𝓾𝓵𝓸 1

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Pov

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Pov. Omnisciente

Un campo lleno de colores verdosos gracias a la gran fauna que yacía allí, un gran árbol, el cual les proporcionaba la sombra necesaria para cubrirse del sol y poder disfrutar el día, por último, una pequeña laguna frente a ambos que se encargaba de reflejar los rayos del sol dándole un brillo inigualable.

Un cenizo un bicolor disfrutaban de la vista, ninguno decía nada, no sólo por el hecho de no saber que decir, sino también por no querer arruinar el momento y el silencio tan agradable.

Bakugou, el cenizo, observó como su contrario se levantaba de su lado, no dijo nada pero lo siguió con la mirada.
El más alto extendió su brazo con la intención de lograr sostener algo, fue cuando finalmente logró ver lo que quería alcanzar.

Claro, estaban debajo de un árbol de sakura, algunas flores de cerezo caían gracias a la suave brisa.

Y la que esperaba el heterocromático caía lentamente, era casi tortuoso, hasta que finalmente estuvo en su mano, ¡que suerte! Era una flor casi completa, se acercó de nuevo a bakugou arrodillandose frente a él.

-- ¿qué estas haciendo? -- preguntó el ojirubi al sentir las manos del mayor a un costado de su cabeza, delineando su oreja y acomodando un poco sus rebeldes cabellos.

-- sólo pensaba... Que te verías aún más lindo con una flor en tu cabello, sería un lindo contraste -- recibió su respuesta justo después de sentirlo alejarse.

Paso su mano por la zona antes tocada, había puesto la flor sobre su oreja. Eso lo hizo sentirse extraño, no un extraño incomodo, sino un extraño... Sólo dejemoslo en raro.

Pero ese sentimiento se borro casi de inmediato, de nuevo se atrevería a preguntar, quería saber su nombre.

-- oye -- llamó atrayendo la atención del otro que se había desviando en algunas plantas cercanas.

-- si? -- su rostro está tan sereno, desde la primera vez que logró visualizarlo en totalidad nunca ha cambiado esa expresión.

-- quiero que me digas tu nombre --

-- ¿mi nombre? -- parecía algo sorprendido -- creí habértelo dicho antes -- mencionó un tanto entretenido.

-- nunca lo he escuchado -- arrugo su entrecejo, signo de fastidio.

Una vez más la expresión del bicolor cambió, sólo miró a bakugo unos segundos más, pareció una eternidad.

-- está bien, lo repetiré... Me llamó...

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𝓘 𝓼𝓮𝓮 𝔂𝓸𝓾 𝓲𝓷 𝓶𝔂 𝓭𝓻𝓮𝓪𝓶𝓼 [TODOBAKU] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora