El otro mundo

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Cerro los ojos y cuando los abrió estaban en pastizales verdes, un sol cálido y se podía ver un pueblo a lo lejos sobre una colina se veía un castillo de mármol blanco que reflejaba la luz del sol y parecía tocar las nubes, observo todo mientras era llevado por los gatos, los habitantes del lugar a veces tenían forma humana con orejas de gatos otros eran gatos que caminaban en dos patas y hablaban todos de distintos colores, pelajes y tamaños.

Llegaron hasta el castillo y los vigilantes que tenían forma de humano con orejas de gatos abrieron las puertas al ver al gato que lo trajo hacia aquí, todos los gatos los dejaron al fin logrando caminar.

—Sígueme —Expreso, se quedó un momento procesando lo que estaba pasando mientras las puertas del castillo se cerraban detrás de él con un eco ensordecedor — ¿A qué esperas?

Gogeta suspiro cerrando los ojos esto tenía que ser un sueño muy extraño tal vez se ha quedado dormido en algún momento y los oficiales vendrán a despertarlo en su celda dentro de unas horas, así que no le quedaba otra cosa que avanzar si este sueño era lo único bueno que tendría en mucho tiempo que así fuera.

—Aun no sé tu nombre —Habló al momento de alcanzarlo —

—Soy el general Shallot, el rey Vegetto tiene gran confianza en mí y por eso me encargo la misión de buscarte. —Recorrió los pasillos con gran confianza algo que Gogeta no podía entender porque el lugar era simplemente enorme —

— ¿para cansarse conmigo? —Shallot afirmo esto —Pero es un rey podría casarse con cualquiera.

—Y te eligió a ti, felicidades —Contestó no sabía si eso fue una burla o realmente estaba siendo honesto —

No siguió intentado hablar con Shallot hasta que lo llevo a unas puerta enormes que tenía un hermoso tallado de árboles dos guardias estaban apostados en la puerta para que uno la tocara.

—Mi señor, he cumplido con mi misión trayéndole a su prometido Gogeta Son —Las puertas se abrieron para que Shallot le dijera que puede pasar —

Trago saliva nervioso mirando hacia lo que de donde estaba parado se veía una habitación finamente decorada uno de los guardias lo empujó hacia adentro y las puertas se cerraron, eso de las puertas cerradas le estaba poniendo de los nervios.

— ¿Precioso? Digo. . . ¿Rey Vegetto? —Habló su voz tartamudeo un poco mientras las cortinas de la cama se habrían revelado a su gato, sonrió sintiendo una enorme emoción de volver a verlo se acercó lentamente para tomar al felino entre sus brazos aun si fuera un sueño estaba tan alegre de tenerlo de regreso—No sabes cuánto te he extrañado lo preocupado que he estado desde que te fuiste.

—Lamento haberte preocupado, necesitaba volver a mi reino —lentamente el felino se fue transformando tomando esa forma a la que solo había podido ver la silueta en sus sueños ahora podía notarla claramente, trago saliva por ello sonrojándose al tenerlo en sus brazos en estado de desnudes —Tienes ojeras ¿no has dormido bien?

—Han sido tiempos difíciles para mí —Murmuro soltando un suspiro, lentamente el rey lo fue guiando hasta tenerlo acostado en esa cómoda cama tan suave —

— ¿Qué ha pasado? ¿Tu ex ha vuelto a molestarte? Porque si es así volveré al mundo humano a terminar lo que no me dejaste esa vez —Gogeta soltó una risita negando — ¿Qué es?

—estaba preocupado por perderte y que te hubiera pasado algo, además las cosas estaban bastante tensas porque no lográbamos resolver el crimen del asesino enserie, se unieron los de inteligencia y había una mujer de inteligencia a la que yo le atraía pero la rechace, manipulo la evidencia, me incrimino y me arrestaron.

El gato que adopte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora