•°CAPITULO 2°•

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Narrador:
Era una mañana normal, inicio de semana para ser exactos.

Un cenizo estaba sentado en su pupitre, viendo por la ventana como el amanecer seguía presente. Faltaban pocos minutos para que la campana sonara y dará inicio a la jornada escolar. Su ceño se frunció y volteo a ver a la puerta. En ese mismo instante, la campana sonó. Muchos alumnos comenzaron a entrar por la puerta, entre ellos el peliverde. Que sin dudar un segundo, este mismo apartó el lugar al lado del cenizo.

Camino al asiento y se sentó, rápidamente lo saludo y fue interrumpido por la castaña más ingenua, estúpida y retrasada-en temas sociales-. Esa chica era extremadamente escandalosa, siempre quería la atención de todos como si ella fuera el centro del universo.

La mayoría del salón opinaba que ella era la viva imagen de un mujer perfecta. -Perfectamente retrasada y estupida- pensó el cenizo, según el, Ochako era la imagen de lo que quieren los hombres de la época antigua, y que sin duda, en la actualidad era difícil encontrar alguna como ella, así que era fácil deducir que tenía a varios del salón detrás de ella.

El cenizo creía que el peliverde opinaba lo opuesto.

Narra bakugou:

Hace un tiempo no hablaba con el peliverde, pensé que sería porque el estaba ocupado, pero al parecer era otra opción.

-Deku-kun! Ojalá te hubieras divertido en la fiesta de el sábado, oh! Y además- espero que disfrutarás mucho las películas de ayer! Enserio te agradezco por asistir. -Dijo esa castaña. Mientras saltaba y movía sus manos muy rápido alrededor del peliverde.

Cuando escuché eso mi mente estalló, lo sabia, ese peliverde solo me utilizaba para sus ratos libres de estrés. Quizás fui muy ingenuo al juntarme con el.

-Uraraka-san! Ya te lo había dicho ayer! No fue nada, gracias. -Dijo con su típica sonrisa y sus ojos verdes brillosos. La castaña estaba por agradecerle cuando fue interrumpida por el maestro.

Me alegro que por fin la callaron, siempre tiene que estar hablando alto, llamar la atención y hacer escándalo. La mire de reojo y en su camino me encontré con esos ojos verdes. Me sonroje levemente pero después recordé a la cara redonda y dejé ese sonrojo.

[•••]

Pasaron las primeras horas, al parecer el maestro venía un poco más cansado de lo normal y se durmió en medio de clase. Estaba por pararme e ir a tirar una hoja con dibujos de pitos, el pelos de mierda me lo dibujo cuando fui al baño entre clase.

Antes levantarme alguien me sostuvo el brazo, era el peliverde, lo mire, se acercó a mi y me susurro en mi oído-En el descanso hablamos...- Dijo en voz baja, me soltó y volvió a su sitio, me quedé en shock y me levanté para terminar con mi labor.

Regrese a mi asiento y mire mi cuaderno de notas, había una pequeña notita que decía "No es lo que piensas, en descanso hablamos".

Me quedé en shock, sabía de quién era, así que lo volteo a ver pero estaba con el mitad mitad. Al parecer el estupido no sabía hacer un simple problema.

Deku le dijo que el tampoco sabía y que podía preguntarle a mi. Yo me quedé en shock, el mitad mitad me miró y camino hacia mi asiento, se sentó al frente y me preguntó que si le ayudaba.

No quería hacerlo, pero el peliverde me envió una señal con los ojos a qué lo hiciera. Obligatoriamente lo hice, pasaron varios minutos en dónde el bicolor seguía dudando pero al final comprendió, me agradeció y se fue para después explicarles a otros compañeros.

Eso me sorprendió, no sabía que la mayoría no comprendería algo tan fácil como un problema, mire en dirección al pecoso y me sonrió, me volví a sonrojar y está vez un poco más para que se notará. Dejé de mirarlo y mire mi cuaderno, volví a hacer pequeños dibujos atrás del cuaderno, sabía que el sonrojo no se iría por un buen tiempo.

Narrador:

El maestro se despertó por el ruido que se comenzaba a presentar en la aula y dio a comenzar las preguntas o dudas que tendrían algunos. La mayoría al parecer no presto atención y pregunto lo básico de los problemas.

Bakugou no estuvo entre ellos afortunadamente y decidió a enfocarse en sus apuntes.

[•••]

Comenzó el descanso y la mayoría comenzó a salir, bakugou sacaba su bentō, saco su botella de agua y camino hacia la unica zona no tan transcurrida de la cafetería, siempre quedaba sola esa mesa, se sentó y comenzó a comer su bentō.

Bakugou vio como el peliverde llegaba para sentarse frente a el y comenzar a comer su platillo de cafetería.
El lo vio normal mientras seguía comiendo.

-Perdon que te hayas enterado por Ochako que fui a una fiesta. En realidad no quería asistir pero me insistieron demasiado e incluso le llamaron de alguna forma a mi madre para que me dejara ir. -Dijo con estrés. Comenzó a comer tranquilo mientras esperaba respuesta del contrario.

-¿Por qué simplemente no te alejas de ellos? Siempre te quejas. -Dijo enfadado, el peliverde siempre se quejaba de cuánto odiaba que le insistieran de algo tan básico.

-No quiero dañar mi reputación de un niño bueno. Lo único que me mantiene para no estallar, eres tú. -Dijo antes de seguir comiendo, el cenizo en cambio se quedó pensando por lo que acababa de decir.

Bakugou trago lo que estaba comiendo y tomo un poco de agua, sentía que se estaba inundado el aire con incomodidad.

-¿Que quieres decir con eso, nerd? -Dijo levemente molesto, no sabía que significaba ello.

-Que eres el único que me entiende, hablas normal conmigo después de decirte mi verdadera forma. Eso quiere decir que eres muy leal...o que solo quieres un poco de atención porque tus padres no están muy presentes en tu vida y necesitas algo con que olvidarte de ti.

Eso a bakugou le callo como balde de agua fría, no sabía que estar así significaba todo eso. Termino su bentō y tomo más agua.

-Wow...no sabía que pensabas así. -

-Bueno..., cada quien con su vida, yo no tengo derecho de meterme en la tuya. Además, eres mejor que todos ellos juntos. -Señalo a la mesa donde estaban sus "Amigos".

Bakugou se sorprendió, tomo más agua vio al peliverde.

-Que halago. Bueno...¿acabando vamos al salón? -Dijo para sacar completamente la incomodidad.

-Claro kacchan, solo déjame terminar y nos vamos, odio estos lugares llenos. -Dijo para terminar de comer su plato.

[•••]

Ya estaban en el salón, los dos hablando de cosas tontas de algunos de sus compañeros, por ejemplo, cuando a mimeta se le encontró levantando la falda de jirou y está no hizo ni dijo nada.

Varios pensaron que estaban en una relacion pero al parecer jirou ni siquiera sabía de ello.

También la vez que a Kirishima le dejaron una carta de amor que al final era para mina. Nadie se imaginaba que alguien estuviera enamorado o enamorada de la pelirosa, ahora todos prestaban atención a los movimientos de las personas cerca de la pelirosa.

Los dos dejaron de hablar cuando la castaña llegó y se llevó al peliverde a su asiento, el timbre había sonado avisando que continuaría la jornada escolar.

Todos se preparaban para la clase mientras el maestro llegaba.
El cenizo no fue la excepción, pero se enojo de que interrumpieran la charla entre el y el peliverde.

Después de eso se concentro en clase, bakugou no podía descuidar sus calificaciones por un simple enojo.

Cómo decía su mamá "Los estudios son lo más importante"...

Mi Dolor...[Dekubaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora