Love inattendue- Blairon

×9×

No era de extrañar que Blaise sintiera confundido y enojado en el momento en que Ron se acercó a él a finales de una clase.
Todos se habían ido nuevamente y no quedaban más que ellos dos. Blaise no se dio cuenta el momento en que se quedaron solos.

-Hola- saludó el pelirrojo.

Blaise tan solo lo miró, haciendo un gesto con su cabeza.

-¿Todo bien?- continuó.

-Si. ¿Por qué?

-Quería saber...

-¿Ahora te interesa, Weasley?

Blaise se dio vuelta violentamente, quedando frente al oelirrojo. Su mirada expresaba enojo y Ron se detuvo en seco ante la actitud de Blaise. Sin embargo, lo comprendía y se esperaba una reacción así. Tomo fuerzas nuevamente mientras se preguntaba ¿Sus ojos siempre fueron del mismo tono? Y se reprendió a sí mismo por pensar en eso.

-Estuve pensándolo mucho...- comenzó, pero fue sobresaltado por un ruido a sus espaldas. El moreno notó eso y su mirada se ablandó un poco.- Eh ¿Vas a hacer algo ahora?

Blaise levantó una ceja inquisitivamente. Se cruzó de brazos y lo observó durante unos tortuosos segundos antes de responder.

-¿Por qué?

-Vamos a algún lado, solos, para hablar.

-¿De qué?

-De... algo.

El moreno permaneció en silencio unos segundos. No sabía que quería hacer. Por un lado, quería ir con él y estar a solas, pero por otro, su orgullo estaba lastimado, al igual que sus sentimientos, y estaba en un sentimiento de bronca contra el pelirrojo. Le dolía la forma en que lo había rechazado sin siquiera hablar y ahora se estaba presentando ahí, sospechosamente amable y entregado. Lo confundía y no le gustaba estar así. Pero por otro lado ¿Qué otra oportunidad tendría? ¿Valía la pena arriesgarse?
La balanza sentimental se equilibró y tomó una decisión.

-¿A dónde vamos?

Ron lo observó fijamente, no creía que Blaise realmente aceptara y ahora volvía a dudar si era lo que quería hacer, pero ya estaba hecho y no había vuelta atrás. Tenía que seguir. Se aclaró garganta y contestó.

-¿Dónde es un lugar privado?

Blaise dudó.
-¿El aula vacía del 2do piso?

-¿No la usaban para...?- Ron hizo señas con sus manos.

-Si, exacto.

-Ah...

-Si no- comenzó el moreno, jugando y midiendo al pelirrojo- te puedo llevar a la sala común de Slytherin. Ahí no nos van a molestar de ninguna forma.

Sonrió irónico, sabía que no iba a aceptar. Pero su sonrisa comenzó a desdibujarse cuando el pelirrojo comenzó a analizarlo seriamente y Blaise temió que aceptara de verdad. No podía llevarlo a la sala común, no ahora.
Para su alivio, Ron decidió que no era buena idea, por lo que arreglaron para encontrarse en esa sala una hora después, más tranquilos.

Ambos volvieron a sus respectivas salas comunes, ignoraron las preguntas de sus amigos y comenzaron a prepararse para el encuentro. Ron estaba sudando.

Hacia algunos días que un pensamiento se introdujo en su mente y nunca lo pudo sacar. ¿Qué pasaría si lo acepto?
Fue repentino, rápido e inesperado. Lo atacó mientras estaba dormitando y quitó su sueño. Dedicó el resto de la noche a ver los pros y contras de esa decisión. Igualmente no quería pensar tanto en eso, porque pensarlo significaba aceptarlo y no creía estar seguro de querer aceptarlo. Había mucho en contra y lo intimidaba, no sabía si valía la pena.
Por otro lado, le gustaba la idea de que alguien haya podido fijarse en él. Dentro de muchas personas, alguien lo había elegido romanticamente y se sentía adulado por eso. No quería dañar los sentimientos del chico porque le gustaba que gustará de él. Aumentaba su confianza y autoestima, ya que pensaba que si Blaise pudo hacerlo, tal vez alguien más pueda.
Pero comenzó a pensar si quería que fuera alguien más. ¿Qué de malo tenía el moreno?
Eran de grupos diferentes, si. No le caía para nada bien su grupo ya que desde primer año se habían metido con sus amigos. Pero Blaise tenía razón, nunca había tenido un problema personal o directo con él, el asunto era mayormente con Draco, Crabbe y Goyle. Pero el rubio ya no frecuentaba a esos chicos y parecía estar con un mejor grupo así que... ¿Qué tan malo sería?

Por otro lado ¿Quería estar en una relación? Estaba bien como estaba y no había pensado en iniciar una relación con nadie pero ¿Qué si pasaba? ¿Estaba preparado? ¿Qué si se hacía ilusiones y Blaise no quería nada realmente? ¿Quería estar con un chico?

Había tantas dudas que asaltaban su mente sobre cosas que jamás se había cuestionado pero ¿Valía la pena arriesgarse? ¿Qué tanto podía perder?

Los pensamientos lo atacaron por mucho rato más y, después de grandes debates mentales,  decidió que era hora de probar suerte. Por lo que se encaminó arreglar las cosas con Blaise y ver que podía surgir de esa relación. Pero para eso, necesitaba hablar muy seriamente y expresar sus sentimientos, algo que se le complicaba demasiado pero estaba dispuesto a arriesgarse y sentir. ¿Qué podría pasar?

Inquieto pero tranquilo con su inconsciente, caminó hacia el aula vacía del 2do piso, esperando que el moreno ya esté allí o no deba esperar mucho.

Al entrar no encontró a nadie. Resignado, se sentó sobre una mesa vacía, esperando. Pasaron los minutos y Blaise no aparecía. Incluso temió confundirse con el salón y el horario, pero luego de revisar se dio cuenta que estaba bien.

Estar solo no ayudaba a tranquilizar su mente y el mismo pensamiento lo atacaba constantemente "Blaise te engañó, no le gustas, era una trampa, un juego. Jamás le gustaste y todo era una broma. ¿De verdad te lo creíste? "

Se intentaba contestar con que no, que todo era de verdad y solo estaba retrasado pero a medida que pasaba el tiempo, menos se lo creía y más crecía el presentimiento de sentirse un idiota al respecto.

Enojado consigo mismo, caminó hacia la salida. Estaba a punto de irse cuando el moreno irrumpió abruptamente en la puerta.

Ambos se encontraron en la entrada, observándose en total silencio. Ninguno se movía y parecían capaces de quedarse ahí por horas, hasta que un chasquido a sus espaldas, producido por la misma mesa en la que Ron se había sentado, los sobresaltó. Ron carraspeó y ambos volvieron a entrar al aula.

Hombro con hombro, tal como el día de la cita, caminaron juntos hasta dos mesas posicionadas frente a frente.

Ambos se sentaron sobre dos mesas que no parecía que se hayan usado al menos desde el siglo pasado. Blaise observaba fijamente a Ron, pero este agachaba la cabeza, evitando la mirada.

Se acomodaron en silencio, uno frente al otro, listos para decirse todo lo que tenían para decir.

Qué onda gente?
Me siento mal, pero bueno.
Acá un nuevo capítulo, llegando a momentos muy....
En fin, disfruten y gracias por leer<3