ʙᴏɴᴛᴇɴ × ʙᴅsᴍ • [ONE SHOTS TR]

Money, money, money.

Brat
Ima Yamamoto

Hajime.

Las reuniones de Bonten son tan aburridas, estaba pensando en que más podría invertir para ganar dinero cuando la puerta sonó y unos tacones llamaron mi atención, levanté la mirada rápidamente esperando que sea él, cuando vi a una mujer de cabello obscuro y ojos grises.

-Buenos días Bonten -tomó asiento e hizo que sus acompañantes nos entregaran unos portafolios.

-¿Qué es esto? -Mikey preguntó sin mucho interés.

-¿Quién eres? -habló ahora Mochi.

-Soy Ima Yamamoto y vengo a presentarles un nuevo proyecto dónde se destinarán todos los millones ganados a solo ustedes -dijo de forma segura.

Me sorprendió aquello que dijo, hace meses necesitaba de eso. Más millones.- ¿Y cómo? -pregunté con emoción.

-Bueno, la cosa es así... -se puso de pie-. Necesitamos una cortina de humo, alguna... Donación o algo así.

-Yo puedo ayudar en eso -habló Takeomi.

-Bien y también podemos...

-¿Podemos? -interrumpió Mikey de manera seria.

-Sí, podemos.

Rió burlón-. Yo no lo creo, nisiquiera te conocemos Ima.

-Es por eso que estoy aquí, para que me conozcan. La verdad es que en el bajo mundo se habla de que Hajime está algo corto en dinero... -quedé perplejo ante sus palabras.

-¿Eso es verdad?

-Eeeeh... Bueno, no. Sólo fuí a saldar cuentas con viejos amigos -reí nervioso.

-Habla -le dijo a Ima.

-Señor Akashi, ¿cúal es su idea? -se recargó en la mesa.

-Hay una escuela que me interesa, quiero invertir en ella -ella sonrió victoriosa.

-Si es que esta idea les parece, vayan mañana a mi Oficina, sino van lo tomaré como un rechazo a la idea. Nos vemos mañana Bonten -dió media vuelta y salió de la sala haciendo sonar sus tacones.

-Carajo esa chica es ardiente. Si volvía a retarte juro que me venía -dijo el estúpido de Ran.

-¿Lo tomaremos? -pregunté.

-Si es verdad lo que dijo y que estás mendigando, entonces sí
Tú irás mañana a decir que aceptamos y comenzar lo más pronto posible -Mikey de levantó y se fué.

Emocionado me levanté y me fuí a beber algo. Al fin tendría a más de esos bebés verdes.

Siete meses habían pasado desde que comenzó el proyecto del Auditorio "Hana Ishikawa". Todo este tiempo fuí ascensor de Takeomi porque resulta que es un imbécil en finanzas. Lo bueno de todo esto es que pasaba mucho tiempo con Ima. Con tan sólo tres meses de conocernos me di cuenta de que era una persona extraordinaria, pero desde Inui no puedo enamorarme, sólo pienso en él y quiero que todas las personas me hagan sentir como él me hacía sentir.

La atracción que siento por ella es física, más que nada sexual. He estado sin acción por tantos años que puedo follar hasta con una viejita de ochenta años.

-Koko... Koko.

-¡Koko! -salí rápidamente de mis pensamientos.

-¿Qué? -estaba sentada sobre el escritorio.

-Ya se han ido todos, ¿te vas a quedar hasta tarde... Otra vez? -la última vez que me quedé ha hacer horas extras terminamos follando en el baño de la Oficina.

Sonreí y caminé hasta estar frente a ella. Pasé mis manos por sus muslos desnudos y jugué con el pliegue de su falda. Jaló de mi camisa y comenzó a besarme, adoraba cuando hacía eso. Metí mis manos hasta llegar al resorte de sus bragas, comencé a bajar las hasta despojarla de ellas. Las guardé en el bolsillo de mi pantalón.

-Aaah Hajime -gimió en mi oído.

Mi mano serpenteó hasta su, ya mojado, clítoris. Daba círculos sobre él, con mi mano libre aprestaba su cuello.

-Quiero que me la chupes -le ordené.

-Mmmh no, yo no quiero -su actitud desobediente me molestaba.

Hice más presión en su cuello, ella puso los ojos en blanco y soltó un suspiro cuando volví a presionar su punto. Movía mi mano tortuosamente lento.

-Koko más... Rápido -pidió e hice lo que dijo.

-Lo que usted órdenes -mi pulgar subía y bajaba jugando con su punto.

Ella gemia tan jodidamente bien, mi erección ya no lo soportaba. La bajé rápidamente y la acomode a mi gusto. Iba a meter mi erección cuando ella cerró las piernas.

-¿Qué haces, Ima? -ella reía como niña pequeña haciendo maldades.

-Nada... Ganate lo Hajime... -decía con su tono altanero mientras movía el culo.

-De verdad aveces me sacas de quicio -estampé mi mano en si culo a lo que ella gritó.

-¡Aaah! Así no lograrás nada -sonreí al ver que su coño cada vez se mojaba más.

Metí mi dedo entre sus labios buscando su abertura, ella jadeaba y lentamente aflojó su presión.

-Mi linda y hermosa Ima... Vas a abrir esas hermosas piernas para mí ahora -encontré su coño y rápidamente metí mi pene en ella.

Soltó otro grito, daba estocadas fuertes mientras con mis manos le quitaba la blusa y dejaba que sus tetas botaran libremente.

-¿Te gusta así? -la escuchaba gemir, cosa que sí, sí le estaba gustando.

-N-no... -le di otra nalgada-. ¡Aaah! sí, sí me encanta -estaba a punto de correr me.

-¡Me voy a correr Hajime! -las estocadas se hacían más rápidas y torpes. Un par más y dejé salir todo mi líquido blanco.

Salí de ella, me limpié y me fuí.