Instinto

Y el Capítulo 3

YoonGi se desconocía: desde que tiene una relación amistosa con su Profesor no ha dejado de sonreír y hablar de muchos temas con él, es como si lo comprendiera, lo conociera de toda la vida y supiera que decir exactamente para lograr seguir captando su atención y por alguna extraña razón también agitando su corazón.

JiMin sin duda estaba encantado con la manera en la que se iba desarrollando su relación con el bello humano, podía ser el mismo sin etiquetas, modales, solo relajarse y decir lo que realmente sentía... A excepción de sus sentimientos claro.

Y es que JiMin no podía ir y lanzarse con sus sentimientos a YoonGi cómo si nada, no es que sus sentimientos no lo valgan, pero ese bello chico a sufrido demaciado como para pasar por el momento en el que tenga que decidir sobre aceptar sus sentimientos y darle una oportunidad a rechazarlo y no volver a hablar de ellos o mucho peor que él se aleje.

¡Es que simplemente no podía pasar! 

¿Y por qué no? Porque estaba enamorado de él y no podía, no, no quería dejarlo más solo, fin de la discusión y fin a su lobo tonto que no hacía más que chillar cuando veía esos ojitos gatunos.

Y bueno dejando eso de lado sale de sus pensamientos y vuelve a poner su atención en YoonGi y así evitar pensamientos reproductivos.

Ahhh pero como los iba a evitar si YoonGi es exactamente la persona con la que desea estar 25/8 es la causante de esos pensamientos.

- JiMin -

Llamo aquella grave y masculina voz.

- ¿Sí mi Dongsaeng? -

Re-lamió sus labios nervioso porque pensó en la posibilidad de que haya leído su mente.

El azabache solo sonrió por la atención de JiMin.

- Te quedaste en blanco, dijiste que me quería preguntar algo -

Sonrió mostrando sus encías que lo hacían tan tierno y alegre a los ojitos de JiMin. YoonGi deseaba ser la persona especial para JiMin, aquella a la que le cuentas todo sin rodeos, a la que le dices tus momentos más vergonzosos hasta aquellos momentos felices e importantes ¿Por qué no? Se consideraba una persona fiel y razonable. Deseaba que JiMin se diera cuenta de ello.

O talvez ya lo hizo y su persona no se da cuenta.

- Ay Dios que pena bueno si te quiera preguntar algo pero ya no te quiero preguntar eso te quiero preguntar otra cosa ¿Te puedo hacer una pregunta? -

YoonGi sonrió: disfrutando únicamente del sonido que emitía la voz del alfa. A medida que pasaban los días y ambos se conocían mejor, la impresión que YoonGi tenía del alfa se iba modificando. Descubría que, si bien seguía siendo bastante impulsivo en algunas ocasiones, también era una persona muy inteligente y reflexiva. Y eso le gustaba porque finalmente, se dio cuenta de que no importaba tanto si él pensaba mucho o poco antes de hablar. Lo que realmente le importaba era la calidad de lo que decía y cómo lo decía. Y en eso, JiMin era muy bueno. Así que YoonGi se permitía relajarse y disfrutar aún más de las charlas que deseaba tener a su lado.

Pero a veces solo a veces pensaba muy pero muy seriamente si el joven hombre frente a él si pensaba antes de hablar, podía escucharlo todo el día si era necesario, pero esa duda, siempre bueno no siempre solo muy a veces le rondaba por la mente.

Ugh ya JiMin le está pegando algo de su personalidad.

Por último solo se rió ante sus pensamientos tan ocurrentes.

- Hazme las preguntas que quieras JiMin ah -

- Oh no no, solo es una. Bueno mi consulta es que si quieres ir a mi casa a cenar como una celebración a lo que logramos hoy -