Un cielo lleno de nubes negras, que apenas dejaba que la luz llegara a la playa en la que un hombre de pelo negro miraba el océano enfrente de el. Confundido y con miedo miro a los lados encontrándose con nada mas que arena de color negro que no tenia principio ni fin.
El joven miro detrás de el pero solo vio lo mismo, un océano interminable con una playa negra ¿Qué estaba pasando y porque estaba en aquel lugar? El hombre con curiosidad y miedo continuo su caminata alrededor de la arena; manteniendo la distancia con el agua, nadie sabe que puede haber allí.
El joven hombre de pelo negro se preguntaba si era un sueño pero su pregunta fue respondida gracias a la aparición de un rayo de luz que sobresalía sobre los demás.
—¿Hola? ¿Policía? ¡Necesito ayuda, estoy perdido! —Dijo el joven hombre cubriendo la luz con la mano—. ¡No se donde estoy y ni como llegue!
La luz era tan brillante que tenia que cubrir su rostro con su mano hasta que desapareció, el joven miro a todos lados en búsqueda de aquel rayo de luz pero solo vio a una mujer alada parada sobre el agua, el hombre se sorprendió, tal vez el mar no era profundo y solo era el reflejo de las nubes la que lo hacia ver profundo; dio un paso hacia el agua y no se hundía por mas adentro que caminaba.
—Oye disculpa, ¿Sabe en donde estamos, señorita? —Pregunto el joven hombre.
—Pues claro, estamos en lo que uno llamaría "purgatorio" —Dijo aquella mujer con vestido blanco—. Y tu haz fallecido recientemente, lo lamento, Miles Callahan.
—Uhm, Disculpa ¿Que? —Cuestiono Miles.
—Yo soy tu "Ángel Guardián" y tu haz fallecido recientemente por una granada al rostro, fuiste buen soldado pero también fuiste malo en un 50% en toda tu vida, otra vez.
—¿Otra vez? ¿De que hablas? ¿Acaso yo- —Miles se tomo de la cabeza al sentir un retumbar que lo cargaban de memorias.
Ahora veía una ciudadela antigua en medio del desierto y su piel era de tez morena, estaba enfrente de una mujer egipcia que estaba teniendo relaciones con un hombre romano; aquella mujer detuvo su acto y fue con el.
" <<>> " Están hablando en otro idioma. —Nota del autor.
—<<Buen día, Dakarai, necesito que le des este recado a Julio César para nuestro acuerdo>>. —Dijo aquella mujer de ropas egipcias.
—Así será, Cleopatra... —Dijo Dakarai al tomar la carta.
Ahora estaba en un nuevo recuerdo, parecía la Inglaterra victoriana por las ropas que llevaba el y a la mujer que estaba asesinando con el cuchillo que tenia en mano y que limpiaba la sangre con agua embotellada.
—<<Vamos, El destripador puede estar en cualquier lado, aquel grito de hace unos minutos fue tal vez otra victima, que sabe lo que ese monstruo le a de estar haciendo..->> —Dijo un policía ingles acompañado de otro.
—<<Ya es hora de irme, igualmente ya termine mi obra de Arte>> —Dijo para despues jugar con el cuchillo mientras se adentraba en un callejón—. London bridge is falling down, my fair lady...
Miles volvería ala realidad y miraría a aquella mujer con vestido blanco, ya sabiendo quien era aquella mujer que le daba una sonrisa cálida, el joven pelinegro se acerco a ella y le pregunto: ¿Podre ascender? A lo que ella solo negó con la cabeza.
Con un tono molesto le cuestiono que estaba mal ahora a lo que el ángel guardián le volvió a explicar las reglas del paraíso y el abismo.
—Te recuerdo; tu eres alguien que ha repartido tanta maldad como bondad, un 50/50 de ambas, debido a eso no fuiste los suficiente mente malvado como para ir al abismo y ni tan bueno como para pasar al paraíso. Por lo que, a seres como tu que tienen un balance perfecto, se les obliga a reencarnar en su mundo para que puedan encontrar un desbalance y poder pasar a otro lugar, pero tu sigues igual.
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Attack on Titan: Reincarnation.
FanfictionUn emisario busca "ascender" y para eso tendrá que sobrevivir un mundo lleno de titanes junto a compañeros, un mundo lleno de misterios.