Gritos, fuego y destrucción era lo único que se podía ver y escuchar desde la capital de Marley, la gente hacia lo posible para alejarse de la maquina que llego del espacio. La gente estaba desesperada pero su salvación llegaría mas pronto de lo que creían.
—¡General! ¿Qué hacemos? ¡esa cosa nos va a matar a todos! —Dijo un soldado.
—Hmmm... Llamen a los demonios. —Dijo el general
Los soldados se movieron e hicieron lo que se les ordeno pero eso ya no seria necesario; la maquina aparecería enfrente de ellos y les apuntaría con sus cañones, pidieron piedad pero la maquina disparo.
Los soldados se cubrieron para recibir el rayo pero nunca llego, todo gracias a un ser de 18. 2 metros, que dejaba en tonto a la maquina de 10 metros. Aquella bestia correo hacia la maquina y con un gancho hacia arriba, la elevo en los aires y luego la estrello contra el suelo; sosteniéndola con una mano para evitar que se levante pero lo único que ese ser del espacio veía, era el reloj de arena que tenia en el pecho con un destello en verde.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¡Mataste a esa gente inocente, no te lo perdonare! ¡Prepárate a recibir la ira de humungosaurio!—Dijo Humungosaurio.
Con rapidez golpeo a la maquina repetidas veces hasta que de un disparo de energía lo haría retroceder los suficiente para levantarse; Humungosaurio se protegió con los brazos en forma de X hasta que sintió un puñetazo en el abdomen, la bestia escupió sangre al abrirla boca pero luego la cerro gracias a un gancho de la maquina, Humungosaurio se recupero y con ambos brazos la golpeo en la cabeza como su fuera un martillo.
Humungosaurio dio un giro sobre su eje para golpearlo con su cola que tenia una bola con picos justo en la punta, la maquina retrocedió con pequeños rayos saliendo de su cuerpo por todo el daño que recibió, rápidamente se dio la vuelta para dispararle pero de una bofetada movió el cañón de su arma para despues golpearla con un izquierdazo.
—No eres tan rudo como creí. —Dijo Humungosaurio al tronar sus nudillos.
Humungosaurio se preparo para atacar pero varios rayos de energía lo atacarían por la espalda, eran los drones que la maquina desplego al llegar, Nero se cubrió hasta que la maquina lo abrazo por detrás y lo elevo en los aires casi llegando a las nubes.
Humungosaurio intentaba separarse pero la maquina lo abrazaba con fuerza, hasta que esta lo dejo, el alíen caía rápidamente hacia el suelo hasta que callo sobre una plaza creando un gran cráter del que saldría polvo; los drones se acercaron a ver si había perdido pero fueron sujetados y aplastados por las manos de Humungosaurio que despues las lanzo a la maquina que descendía a donde estaba.
La maquina la destruyo con sus cañones al hacerlas explotar creando una cortina de humo de la que saldría humungosaurio que sujeto ambos cañones de sus manos y luego las arranco para despues encajárselas en el cuerpo.
—O-Omnitrix... —Dijo la maquina.
—¿Omnitrix? ¿hablas del reloj? Lo siento, es mío ahora. —Dijo Humungosaurio que tomo del cuello a la maquina.
Humungosaurio piso con fuerza una de las patas de la maquina y jalo la cabeza de la maquina fuera de su cuerpo, las luces de su cuerpo se apagaron demostrando que se había apagado, humungosaurio dejo caer la cabeza y se dio media vuelta, viendo como había una multitud mirándolo, una multitud de gente inocente.
—Tra-Tranquilos, ya acabe con la maquina, pueden volver a sus casas.
—¡¿Es un titan?! —Pregunto un ciudadano con miedo.
—N-No, soy... algo diferente. —Se defendió Humungosaurio de la acusación—. lo siento, ya me voy.
humungosaurio se dio la vuelta pero de detrás de el, caería un relámpago amarillo que a los segundos creo a uno de los famosos titanes de Marley, el acorazado, el titan camino lentamente hacia la maquina mientras que los soldados salían de los techos de los edificios a los alrededores que apuntaban a el alíen.
—¿Que?... No, esperen, yo no soy el malo, es la maquina esa.
El acorazado expulso humo de su boca al abrir la y se preparo para pelear, Humungosaurio levanto los puños pero al igual que la anterior vez que se des transformo, un pitido sonaría desde su pecho por lo que se dio la vuelta y se fue corriendo del lugar, en dirección al bosque mientras se encogía.
Marley ataco con el acorazado al ir detrás de el pero el no seria lo suficientemente rápido para alcanzarlo, Humungosaurio al ya tener la estatura de 4 metros se metería dentro de un edificio en donde volvió a ser Nero, el pequeño se asomo por un mostrador en donde veria como el acorazado apenas había llegado a donde el estaba.
El titan miro a ambos lados y continuo caminando revisando por los lugares hasta encontrarlo a el o a su cuerpo de titan deshaciéndose, si es que era un titan.
Nero se escabulle por detrás y ve a los demás marleyanos huyendo de la zona de combate por lo que se mezcla entre ellos pasando desapercibido ante los soldados. Nero avanzo entre la multitud hasta llegar a la entrada de su hogar en el que vio a su madre, enojada, parada justo en la entrada de su casa.
—Oh viejo... —Dijo Nero con miedo.
—Nero, Lo que hiciste fue estúpido e insensato pero también fue heroico, me alegra que estés bien. —Dijo Eva al abrazar a su hijo.
—Mama... —Dijo al responder el abrazo.
—Por cierto, tienes que aprender a controlar ese reloj para que no te ocasione problemas y no le digas a nadie de el.
—¿Por que?
—Porque si saben lo que puedes hacer podrían intentar usarte como arma o peor, te lo quitarían a la fuerza y se lo darían a alguien que acate mejor las ordenes, que nadie sepa sobre esto, ni siquiera tu padre.
—Entiendo, no le dire a nadie.
—Eso me alegra, ahora volvamos adentro.
Nero fue directo a su cuarto y busco debajo de su cama una carta de su padre, una que decía cual era la siguiente mision de los guerreros de marley; Nero la abrió y miro la fecha en la que esa mision iniciaría y sabría que tiene poco tiempo para aprender a controlar su reloj.
—Solo tengo una semana, tal vez ahora que hubo este ataque tendrán que retrasar la mision de recuperar al "fundador" ¡Esta es mi oportunidad! No la desperdiciare.
Dijo el pequeño Nero al subirse en su cama y prepararse para dormir...
¡Muchas gracias por leer! Lamento no haber publicado capitulo el viernes anterior, era semana santa y tocaba ir a la playa ¡Pero no teman! Por que ya llegue, nos vemos el viernes.
