Naruto el asesino de semidioses

Capítulo 5

Atenea se sentó en su sien frotándose la cabeza. Acababa de llegar de una reunión en la que todos los olímpicos fueron informados de los ataques más recientes del asesino, sí, los olímpicos sabían que uno estaba atacando asentamientos y semidioses, pero no podían interferir debido a las Leyes Antiguas, sin importar cuánto muchos de los dioses querían debido a que sus hijos fueron asesinados de izquierda a derecha.

El ataque más reciente había causado un alboroto masivo, con Poseidón atrapado entre la ira y la desesperación por la muerte de Sally Jackson y sigue arrojado a su dominio, Ares por la destrucción completa de las Amazonas, y finalmente la destrucción de la Quinta Cohorte, que Athena no No lo admito, pero sentí un vicioso placer por las muertes que aún guardan rencor contra los romanos.

Por no hablar de Frederick Chase y su esposa e hijos, aunque a Triste le dolió que el padre de su hija estuviera muerto, ella estaba más concentrada en la razón detrás de estas grandes cantidades de muertes.

"Realmente, ni siquiera vas a consolar a Annabeth cuando acaba de perder a toda su familia, o incluso derramar una lágrima. Wow, sabía que eras una perra fría, pero no sabía que eras tan fría". Una voz dijo en la cabeza de Atenea, haciendo que la diosa gimiera molesta.

'Qué quiero, pensé que me había librado de ti'. Atenea pensó

"No, simplemente no tenía ganas de hablar con una perra, y como eres literalmente la única persona que puedo, elegí permanecer en silencio". Dijo la voz

'Harías bien en mostrarme el debido respeto'. Atenea exigió mentalmente

"O qué, vas a matarme, ya estoy muerta, perra, ¿qué hay de convertirme en un monstruo que parece ser tu respuesta para todos los que crees que lo merecen?" La voz gruñó

"No, pero puedo borrarte de mi mente por completo y dejarías de existir". Atenea amenazó, la voz se rió burlonamente

"Sí, claro, si pudieras hacer eso, tendrías el momento en que aparecí, e incluso si pudieras, no lo harías, ya que tu orgullo no te dejaría borrar ni el más mínimo conocimiento que tengas, incluyéndome a mí". Se burló la voz, Athena gruñó en voz baja sabiendo que la voz no solo era correcta sino que dio una explicación lógica.

Lo que esperaba, considerando que la voz era ella, o al menos una versión diferente de ella.

"Tal vez, pero eso no significa que no pueda ignorarte, Kushina". Atenea pensó

"¡Entonces tendré que hablar más alto!" Gritó Kushina desde su pequeño rincón de la mente de Athena

Athena gimió de frustración al recordar cómo nació la maldita mujer.

Había comenzado con Afrodita dando a ella sus inútiles discursos de "el amor es lo más grandioso" para Atenea y Artemisa, quienes la ignoraron con el último que acababa de regresar con sus Cazadores, dejando a la Diosa de la Guerra para tratar con Afrodita. Atenea simplemente la había ignorado, por lo que Afrodita cambió de táctica y comenzó a burlarse de los "amantes" de Atenea que dicen que ninguno de ellos realmente la amaba, ya que sus hijos nacieron uniendo su mente con los hombres mortales.