❝ Guarda nuestro secreto hasta que te conviertas en uno de nosotros. ❞
Una humana como tú o como yo con padres vampiros se niega a ser parte del linaje vampírico de su familia, pero al conocer a la banda del momento The Vampz descubre que son vampir...
—Entonces esos son sus nombres, no son tan complicados a fin de cuentas.— Estaba metida en un agujero negro del cual se le complicaría escapar pues al ser descubierta viendo la foto grupal de la banda las chicas que hace un rato le contaron los inicios del grupo, todo su sello discográfico, el nombre de sus fans, videos y más pensando que era una fan que recién empezaba a escucharlos, pero era todo lo contrario.
—¿Verdad que son tan guapos? ¿Quién te gusta, Hari? espero que no digas Jay porqué él me gusta a mi.— después de esuchar aquella pregunta lo único que pudo hacer era pensar en los nombres de los chicos queriendo decir uno al azar.
—Pff, obviamente él no me gusta, en realidad me gusta...me gusta...— Su mirada se posó en la foto frente a ella señalando al primero que vio y llamó su atención desde un principio que parecía tener una belleza inigualable.
—Me gusta él.— señaló en la foto al chico de cabellos blancos escuchando la bulla por parte de aquellas chicas.
—¡Te gusta Sunghoon! ¡Nuestro príncipe de hielo! ¡Uhhh Hari-ssi!
Se unió a la bulla queriendo pasar desapercibida entre esas fans de la banda hasta que estas se fueron hasta su lugar ya que la clase iba a comenzar.
—¿En que me he metido?— escondió su rostro entre sus manos evitando el maldecir frente al maestro.
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Cuando la campana sonó todos los estudiantes corrieron a la cafetería como si su vida dependiese de ello y al llegar tarde Hari y Chaewon tuvieron que hacer fila detrás de un grupo de chicos de mayor grado.
—Younseo y su grupo de amigas van a estar insoportables estos días contigo, Hari-ah.— mencionó Chaewon comiendo un par de caramelos que guardaba en su bolso esperando a que la fila avanzará.
—Ni me lo recuerdes, tendré que aprenderme lo básico de esos chicos que ni siquiera me gustan, ni que fueran...— Su mirada se dirigió casi al instante a ese chico alto, guapo con una tez levemente bronceada que llegaba justo frente a ellas con su grupo de amigos a formarse y al recibir una sonrisa de su parte no dudó ni un segundo en saludarlo.
—Hola, K— su tono de voz cambio repentinamente al saludarlo y es que no podía dejar de lado aquellos sentimientos que tenía por el chico más guapo y popular de toda la institución que junto a su grupo de amigos, Nicholas, Ej y Taki parecían ser los chicos malos con los que nadie quisiese tener problemas o malentendidos.
—Hari...hari.— los llamados de su amiga la hicieron reaccionar ya que podía notarse como es que apreciaba cada facción y cada movimiento del chico frente suyo como si estuviera presenciando al ser más bello que se haya visto en toda la existencia de la tierra.
—Silencio, me distraes.— musitó dándole leves manotazos a su amiga sin apartar la vista del chico, pero cuando este mismo se dio cuenta que ella lo miraba solo pudo sonreír con cierta vergüenza volviendo a girarse con sus compañeros, mientras tanto Hari sintió una oleada de nervios y pena por todo su cuerpo mientras los vellos del mismo de erizaban por completo haciéndola volver al mundo en el que vivía.
