21.

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Miré mi celular, diez y media de la mañana, por suerte mi madre no estaba en la ciudad. Tallé mis ojos y me senté en la cama, escuché ruido abajo, para ser específica, sonó como si un vaso se rompiera así que bajé.

Había un gran lío en la casa, vasos por aquí y por allá, colillas de cigarro, botellas de cerveza vacías, frituras tiradas por todos lados y algunos paquetes de preservativos.

Qué asco.

Caminé hacia la cocina y lo primero que encontré fue a Harry tratando de hacer café, y en efecto había un vaso hecho pedazos en el piso.

―¿Qué crees que haces? ―pregunté en un tono de voz bajo mientras me recargaba en el marco de la puerta.

―Creo que café, tengo resaca ―me miró mientras sostenía una escoba.

―Siéntate allá ―señalé un banco―, prepararé tu café.

Harry hizo lo que le pedí y se sentó en el banco, puse el agua en la cafetera y luego el café en uno de los filtros, encendí la cafetera para que el café comenzara a prepararse y mientras éste se preparaba, comencé a levantar los vidrios rotos del suelo.

Salí por un recogedor y metí los vidrios en una bolsa, comencé a recoger algunas de las cosas que estaban regadas por la casa mientras el café estaba listo, saqué dos tazas, una para Harry y una para mí; probé el café antes y estaba demasiado cargado, perfecto para Harry que tenía resaca, pero yo no tenía así que lo rebajé con un poco de agua. Me senté al frente de Harry y comenzamos a tomar el café.

―¿La pasaste bien anoche? ―me miró―. Ya sabes, con Luke.

―Claro ―sonreí―. Luke es muy divertido, pasé un buen día.

―¿Realmente tú y Luke son novios?

Luke y Sofi podían seguir con esta farsa, pero yo no.

―En realidad...

―Lo somos ―dijo Luke entrando a la cocina.

Buen momento para arruinar el momento.

―¿Cuándo pasó? ―preguntó Harry.

―Anoche, en la fiesta ―respondió Luke.

―Que bien ―dijo Harry y tomó un sorbo de café―. ¿Crees que hoy si podamos vernos para repasar nuestra presentación?

Una parte de mí quería seguir con esta mentira, pero otra parte no.

Siempre ganaba la parte que si quería.

―¿Tenemos planes para hoy Luke? ―lo mire tiernamente.

―No ―sonrió―, hoy eres libre ―pausó―, a demás eso de tu presentación es importante así que ve con Styles ―besó mi frente.

―Ya lo has escuchado ―sonreí―. ¿Quieres un poco de café Luke? ―asintió―. Bien, vamos por café.

Me levanté del banco y Luke me acompañó hacia donde se encontraba la cafetera, Harry no podía escuchar nada desde donde estábamos, de igual manera susurré.

―No pienso llevar esto más lejos ―miré a Luke.

―¿De qué hablas? ―me miró Luke.

―No voy a besarte.

―¿Quién habló de besarnos? ―sonrió.

―Nadie pero no lo haré ―le entregué la taza.

―No va a ser necesario.

―Eso espero ―la extendí una cuchara.

―Gracias linda ―dijo en un tono ligeramente alto.

―Luke ―me miró―, el café está un poco cargado, Harry tiene resaca y bueno ya sabes ―sonreí.

Luke se rió en un tono bajo, ¿qué rayos era eso?

Se estaba burlando de mi chico.

―Así está bien linda ―sonreí―. Gracias, iré a darme un baño, a penas salga te llevaré a tu casa.

―No te preocupes por eso ―dijo Harry―, puedes tomar mi auto y sirve que me llevas, no me siento en condiciones de conducir.

―¿Irás con él entonces?

Por supuesto que lo haría. Asentí.

―Bien, entonces te llamo más tarde ―dijo depositando un beso en mi frente.

―En serio gracias ―dijo Harry mientras hacía una mueca―. Tú y Luke hacen una linda pareja, de verdad ―sonrió amargamente.

¡Yo no podía verlo así!

―Es lindo escuchar eso ― sonreí―. Termino de recoger y nos vamos ¿sí? ―asintió.

Esto es terrible.

+ + +

¡Gracias por los votos!

Cit.

The lucky one │Harry Styles│Donde viven las historias. Descúbrelo ahora