Los siete pecados

CAP.9.

- Jennie te extrañe mucho- dijo la chica aun abrazando a jennie

- igual lily
Las chicas dejaron el abrazo y caminaron hasta la casa, donde Lisa entro y despues Jennie. Las chicas fueron a la habitación donde empezaron una conversación.

- ¿como te ha ido con ese chico alto?- preguntó lisa

- bien...la verdad es muy coqueto, para los pocos días que llevo aquí con él...ya he tenido relaciones unas tres veces- sonríe haciendo que Lisa se sorprendiera

- ¡tres veces!- la chica se sorprende

- algo normal, ¿y tú?- pregunta jennie haciendo que Lisa se pusiera roja

- bien...- contestó está haciendo que jennie se diera cuenta de lo nerviosa que estaba

- ¿que ha pasado?- preguntó jennie mirando a Lisa la cual estaba roja

- pues...¡Jennie ya di mi primer beso!- gritó la chica emocionada- bueno. No fue mi primer beso, pero sentí como si lo fuera, pues el primer beso que di no fue deseado.- dijo la chica recordando el pasado.

- trata de olvidar eso ¿sí Lisa?- dijo jennie caminando hacia la puerta- lo importante es ¿quién fue?- emocionada

- Jeon Jungkook- dijo la chica con una media sonrisa en su cara

- ¡¿el maldito Líder?!- preguntó jennie  mirando seria a Lisa

- si...¿que hay que malo?- Lisa miró al suelo decepcionada

- nada Lily... se tu lo amas- dijo jennie abriendo la puerta

Jennie llevó a Lisa a un tour donde ella le mostraba la casa.                                                                              Después de un rato nos sentamos a comer, pues no había comido.

- ¿esta rico el almuerzo Lisa?- preguntó jennie sentada en un asiento al lado de Lisa

- esta deliciosa- Habla Lisa masticando el sushi

Después de unas horas el cielo se torno azul oscuro, ya habíamos comido y ahora veíamos una película. Jennie y yo teníamos una pregunta que nos agobiaba en cada instante. ¿dónde está jisoo?¿dónde está Rose?. Seguro estaban con esos hombres que pagaron por ellas, pero ¿por qué no las habían traído con nosotras?. Sabrá Dios...

Era ya de madrugada, llegamos a la casa de taehyung después de acompañar a los chicos. Cuando entramos el silencio gobernaba la casa. Caminamos a la sala de estar, pero no había nadie, luego fuimos a la cocina y los empleados de servicio nos avisaron que las chicas estaban en la habitación.

Cuando subimos y abrimos la puerta, las chicas dormían plácidamente, Jennie a la orilla de la cama y Lisa al rincón. Camine hasta la cama y justo Jennie se levantó.

- ¿qué está pasando?- preguntó Jennie semidormida

Jungkook se acercó a la cama y atrajo a Lisa para luego cargarla y caminar a la puerta.

- ¡oye espera!- gritó jennie caminando hasta jungkook con unos tacones en su mano- se le quedan los tacones- le entrega los zapatos

- gracias...- jungkook salió de la habitación

- cuidala ¿si?- dijo jennie parada en la puerta de la habitación

Jungkook asintió para luego salir de la casa y montarse al carro, donde el chofer en unos minutos llegaron a la casa y jungkook bajo del auto con Lisa.

El chico caminó con Lisa en sus manos hasta la habitación donde con cuidado la dejo tendida en la cama. Cuando se iba a ir a su habitación Lisa se levantó bostezando, el pelinegro de inmediato se dio la vuelta y trato de hacerla acostar de nuevo, pues era de madrugada en unas dos horitas salía ya el sol.

- duérmete Lisa- el chico camina hacia Lisa

- ¿que horas son?- pregunto la chica frotando sus ojos

- es hora de dormir

Jungkook se acostó al lado de la pelinegra que tenía sus ojos medio abiertos. El chico volteo a la chica quedando el en la orilla y ella en el lado izquierdo dandole la espalda, y puso su mano en la cintura de esta que no tardó en erizarse, pues las manos de jungkook estaban frias y al sentir el toque se erizó por completo. Lisa se volteo quedando frente a frente con jungkook, este miro sus ojos sin quitar las manos de la cintura de la chica. Esta detallo sus carnosos, rosados y sedientos labios, quería volver a besar a Jungkook, pero no sabía si él quería.

Lisa miraba mis labios y pude notar lo sedienta que estaba por besarlos, pero yo sabía que si la besaba me pasaría de la raya y empezaria a tocarla, porque tengo esas ganas desde que la vi en el bar, el caso es que es muy delicada y frágil, es como una muñeca de cristal, yo me conozco bien y se que si la beso me entran las ganas de follarla y lo que menos quiero es lastimarla, así que no la besare, aunque si lo quiero hacer, pero me daba miedo lastimarla como lo hicieron en su infancia, aunque no era infancia, tenía quince años, total si la beso pasaría lo que tanto quiero.

Lisa seguía su mirada a mis labios, yo solo aguantaba las ganas de besarla, pero de un momento a otro está junto sus labios con los míos dando un pequeño beso.

-UnUsuarioMas_MMA

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(E/A: Se les quiere...)

:)