A la mañana siguiente de aquel suceso, Jisung se tuvo que levantar temprano para ir al hospital por culpa de una llamada urgente de las enfermeras.
Y al llegar, se encontró con aquel suceso.
Su madre había dejado de respirar a mitad de noche y no habían podido hacer nada para salvar su vida, parecía que sus pulmones no querían colaborar con la máquina de aire y termino por morir sobre las tres o cuatro de la mañana.
Ni siquiera había podido pasar tiempo con ella, no había podido explicarle como había sido su vida aquellos últimos años, no había podido decirle que era gay, que le gustaba la música, que ella se parecía mucho a él, que la había extrañado.
Simplemente, se quedó mirando su cuerpo ser llevado por las enfermeras. No lloro, porque lamentablemente no tenía los subientes recuerdos y sentimientos por su madre.
Pero aquello era lamentable, hacía solo un día que había llegado a Corea y ahora debía lidiar con el funeral de su madre, familiares a los que no veía de hace años, con su hermano, con su padre, con el piso, pertenencias...
Suspiro, sentándose en una de las sillas del pasillo. Se inclinó hacia delante y enterró su cara entre sus manos, soltando un suspiro. Serían días largos.
- ¿Han Jisung?- pregunto una voz a unos metros de él.
Desconcertado, subió la mirada. Estaba claro que ese chico no era un enfermero, porque tenía su pie derecho escayolado y le miraba con los ojos muy abiertos. ¿Se conocían?
- ¿Te conozco?- pregunto, y noto que parado al lado del chico de pie roto, estaba su vecino Felix. Su cabello rubio y pecas eran demasiado reconocibles.
- Soy Hyunjin.- indico este, sosteniéndose por las muletas.- Hwang Hyunjin.
Entonces abrió sus ojos, pudiendo reconocerlo. Se levantó de la silla y comenzó a recordar sus momentos con aquel chico.
Habían ido juntos al colegio por un tiempo, y no se llevaban nada bien, las profesoras siempre tenían que separarlos porque estaban peleando día si y día también. Justo cuando comenzaron a tolerarse, tuvo que marcharse a Malasia.
Estaba cambiado, su cabello había crecido considerablemente y sus rasgos eran más marcados que hace algunos años. Su estilo de vestir era impecable, pero parecía ser tan torpe como cuando eran pequeños.
- ¿Hyunjin?- murmuro asombrado.- Vaya, hace años no nos vemos...
- ¿Cuándo volviste de Malasia? Dios, hace tanto tiempo.- recordó el otro.- Has cambiado, pero sigues pareciendo una ardilla, tus mejillas son enormes.
- Cabrón..- lo maldijo entre dientes, y ambos rieron.- Tu humor sigue siendo el mismo, y veo que sigues siendo torpe.- señalo su pie.
Hyunjin sintió.- Sí, vaya...me caí bailando.
- Que típico.
- ¿Qué haces aquí?- pregunto Hyunjin, haciendo referencia al hospital.
- Uhm, bueno...- trato de decir, captando la atención de Felix, que aún no había dicho nada.- Vine por mi madre, ella... acaba de morir.
Los otros dos se quedaron sin palabras. Felix se llevó una mano a la boca y no dijo nada.
- Vaya, por la mierda...- murmuro Hyunjin.- No la conocía, pero lamento tu perdida.
- Ah, gracias.- sonrió de lado.
- ¿Lix, estás bien?- pregunto Hyunjin hacia su amigo, que estaba callado y tenso.
- ¿Eh? Si, solo... estoy sorprendido.- admitió, mirando a Jisung.- Lamento lo de la señora Kang, ella me trato siempre muy bien.
- ¿Oh, se conocen?- pregunto Hyunjin, indicando a los dos.
- Somos vecinos.- respondieron al mismo tiempo.
- Vaya, qué pequeño es el mundo..- murmuro Hyunjin.- Si puedo hacer algo por ti, dímelo. Me agrada ver que estás de vuelta en la ciudad, después de todo...- sonrió con lástima.
- Claro.- asintió.
Se despidieron y Jisung se volvió a quedar solo en medio del pasillo.
^^
Llego al departamento de su madre después de arreglar algunas cosas con el tanatorio. Había tardado mucho en encontrarlo, pero hallo el teléfono de su madre y comenzó a llamar a todos sus familiares y amigos.
- ¿Diga?- Respondió la voz de su tía.- ¿Hermana?
- Soy Han Jisung, el hijo de Kang Jiyeong.- informo.- Llamaba para notificar la defunción de mi madre y decir que el velatorio se llevara a cabo en dos días. Siento mucho la perdida.
Hizo aquello aproximadamente durante media hora. Tuvo que soportar llantos, gritos, quejas... casi nadie lograba reconocerle, pero tampoco le importaba.
Al terminar, se tiró al sofá y suspiro. Se sentía mal, creía que incluso podría llorar de no ser por los golpes en la puerta.
- ¿Ahora qué?- se quejó en voz alta, caminando hacia la puerta.
Pero al abrir, se encontró con un par de ojos que nunca espero volver a ver. Su hermano Younghyun.
- Han Jisung..- dijo este al verle.- Cuando has crecido, hermano.
죽음
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Demasiado tiempo // Jilix
FanficFelix se despierta a mitad de la noche por culpa de un policía que llama a la puerta de su departamento. Extrañado por ver todo el pasillo lleno de médicos y policías, pregunta. - ¿Qué es esto? ¿Qué está pasando? - Su vecino de enfrente ha sido enco...