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|01| Arrivée

Song: favorite - Isabel de laRosa
CAPITULO ORIGINAL DE LA HISTORIA
Original Agosto 23/2
ADVERTENCIAS:
+18
lenguaje Inapropiado
Bl
Pareja Principal: Todoroki Shoto (28) and Bakugo katsuki (20).

"Ven, déjame verte, déjame conocerte, déjame aspirar a poseerte y tenerte para mí"
Todoroki Shoto.

Nuevamente lo habían mandado atraer por la misma razón de siempre.

Su bajo desempeño en la materia de artes. No era secreto para nadie ni siquiera su madre trataba de ocultar que era pésimo en dicha materia y es que. Nada de lo hiciera era lo suficientemente bueno para llevar siquiera una calificación aprobatoria.

Le habían dicho que el arte expresa los sentimientos que con palabras no se pueden explicar y eso había hecho ¡Demonios que si!, pero todos parecían no entender o siquiera detenerse un solo minuto para apreciarlo porque él había hecho lo que todos hacen.

Expresarse

Pero era de suponerse que nadie entendiera que el hecho de dibujar explosiones fuera un arte.

En ese ámbito no entendía a los extras -como suele referirse a todos en general- no los entendía ni un poco. Si ; que el hecho de dibujar árboles sobre un atardecer o tres jodidas rayas eran mejor puto arte que el suyo. ¡Incluso un jodido burro deforme era mejor que el suyo! ¿Qué mierda con el profesor? Katsuki estaba más que seguro de que el viejo Sora era más ciego que nada y muy probable tenía su título debido a extorsiones. Que si bien por la mente se le Cruzo la idea de hacer algo así, pero el viejo era un jodido asqueroso de mierda que en más de una ocasión lo pillo mirándole el culo. ¡Su culo! ¿Qué clase de profesional de la educación hace eso? Estaba muy seguro que por eso tenía la peor calificación.

Por no abrirle las piernas a ese infeliz.

Suspiro

De tan solo recordar ese día le hacía querer vomitar.

Al divisar la gran puerta oscura. Tocó tres veces y no fue hasta que una voz gruesa le permitió pasar.
El director Naomasa Tsukauchi lo recibió y el ambiente a su al rededor se volvió incómodo.
No tenía nada en contra de él, pero está era su séptima vez del día en ir a dirección. La primera fue un tanto graciosa, pero las demás ya fue por culpa de terceros. Sumando que el mayor ya prácticamente ya tenía unos tapones de oídos en su escritorio listos para usarlo cuando el se disponía a gritar (inconcientemente). No era su culpa. Simplemente nadie le entendía o se daba el tiempo de hacerlo.

- supongo que lo sabes. ¿Cierto?

- sobre que el viejo volvió a darme una calificación reprobatoria. ¡Por supuesto! - dijo con ironía - Ya todos aquí lo saben incluso mi vieja.