Caricias faltantes // FRATT

Caricias faltantes

Tras los acontecimientos de Infinity War muchas personas habían desaparecido, muchas familias estaban rotas, y aquellos que ya estaban rotos y perdidos, terminaron aún peor. En un limbo sin esperanza tras la pérdida de aquellos que daban luz a su día.

Así lo sintió Frank, al ver desaparecer a cierto abogado ciego de cabello castaños y pestañas largas, que al sentir sus sentidos sobrecargados por una fuerza desconocida, desapareció en una nube de polvo la cual fue arrastrada por el viento de aquella tarde en Nueva York.Había escuchado de la batalla en Wakanda los días después del suceso que borró a la mitad de los seres vivos. Idiotas confiados que no conocían el alcance real de su enemigo, tal vez si lo hubieran estudiado de forma correcta antes del enfrentamiento, como él hacía al volverse el castigador, tal vez no hubieran perdido y la mitad de todo no hubiera desaparecido.

¿Por qué le pasaba otra vez? ¿Por qué perdía aquello que amaba? ¿Amaba? De cualquier forma ya era muy tarde para saberlo.

Y como había prometido una vez a aquellos que había amado antes que al abogado, continuará con su labor de castigar. Los tiempos en los que él y Ronin cruzaron caminos en Nueva York, fue gratificante por la labor realizada por ambos, pero aún asì no podía sentirse capaz de seguir en aquella ciudad tan amada por el abogado. Asì que partiò tratando de encontrar consuelo en las masacres de los grupos criminales a los que perseguiría hasta que acabara con todos ellos o por el contrario terminaran con él y pudiera volver a encontrar a los que amaba......A la afueras de Nueva York y antes del atardecer se volvió a sentir una fuerza retumbante que fue como en oleada sobre todo el mundo y hasta el espacio exterior, trayendo de vuelta a todos aquellos que una vez habían desaparecido.

Mat caminaba, cruzando la calle en lo que él creìa un siga peatonal, no recordaba el chiste que estaba contando al sentir su piel arder una y dos veces, con la misma fuerza ambas veces pero con cierta diferencia en cada ocasión.

- Frank, ¿Sentiste eso? - Preguntó apenas teniendo cierto control sobre sus propios sentidos. Rápidamente se dio cuenta que no estaba ya a su lado, no tenía rastro de èl, su olor, ritmo cardiaco y calor corporal no estaban donde apenas hace un segundo se había encontrado, caminando justo a su lado. - ¡Frank! - Grito desesperado, no sabiendo que pasaba y empezando su odio a ser abrumado por los ruidos de personas desocncertadas, claxon tocando en la calles y los servicios de seguridad entrando en marcha como si estuvieran bajo un ataque. - ¡Frank! - Volvió a gritar creyendo que el contrario de alguna forma misteriosa se había esfumado.

De entre todos los ruidos que escuchó, empezó a identificar conversaciones donde unos decían a los que sonaban desconcertados que habían desaparecido, se habían vuelto polvo. Nadie entendìa que pasaba, muchos si apenas y seguian aceptando lo sucedido años atrás y ahora todo volvìa a la "normalidad".

Matt tampoco entendía, estaba en shock,sin encontrar lógica en lo que escuchaba. Una chica le sacó de su trance pues al ver que era ciego y estaba parado en medio de la calle, creyó qué podría ser peligroso. Ella lo había visto aparecer y le repitió lo que èl ya había escuchado pero no era posible, es como si en un parpadeo él hubiera perdido cinco años de su vida. Pero así fue, o era; habiendo recuperado un poco la compostura, debía asegurarse que sus amigos estuvieran bien, que Frank estuviera bien.

Corrió lo más rápido posible que pudo y trepó entre los edificios hasta llegar al edificio donde él esperaba siguiera siendo su oficina. Sería el punto donde podría encontrar a Foggy y Karen ¿Cierto? Al entrar acelerado no sintió alguna esencia de que alguien hubiese estado ahí en el último par de horas y definitivamente los residuos de olores no corresponden a los de sus amigos.