Lo Que Piensan Los Demas

Realista

Federico: CRISTOPHER YA ESTATE QUIETO
Cris: PERO SI EL EMPEZÓ

Una chica peli castaña iba pasando mientras platicaba con sus amigas hasta que el profesor la llamo a lo que la chica se acerco

Federico: Tiana cuídame que estos salvajes primitivos compañeros tuyos no se agarren a golpes por favor
Tiana: Si maestro

para la mala suerte de la castaña sus compañeras comenzaron a platicar con ella y ella se distrajo alejándose de él "dúo dinámico" en esa pequeña distracción Christopher comenzó a golpear en repetidas ocasiones a Kevin el cual solo tenía la opción de hacerse bolita en lo que su tutor o alguien llegara al rescate rápidamente, los golpes de Cristopher no eran muy fuertes, pero para el menor eran aparte de molestos algo dolorosos.

CRISTOPHER DETENTE - Grito con fuerza la peli castaña intentando separar al antes mencionado de el de tez blanca
¡¡¡CRISTOPHER YA SUÉLTALO!!!

La peli castaña tubo que jalar a él atezado del cuello de la camisa para que dejará de golpear a Kevin.

Pov's Kevin: ¿¿porque me tratas así?? ¿¿Porque me gritas solo intento pasar un buen rato contigo y tú la eliges a ella?? Pues razones tienes, mírala bien ella es alta, cabello corto, aretes, maquillaje, fría, sería, tiene un estilo único, ¿¿¿pero no te das cuenta??? ¡¡¡Ella no te ama, ella es lesbiana!!! Y me da igual porque yo ... YO SOY IGUAL QUE ELLA, IGUAL DE RARO, ¿¿¿por qué te fijarías en un rubio maricón???!! a quien engaño, el juntarme con los machitos de la escuela, no me convertiría en uno de ellos, qué más da lo que diga Antón te amo me gustas y ni siquiera lo notas, daría lo más valioso para mí por un pedazo de tu atención, pero no sé si tú te arriesgues de la misma forma ...

Kevin estás bien??? - Cuestionó la castaña con temor en su mirada
A lo que el de tez blanca asintió con la cabeza con lágrimas en sus ojos si Tiana gracias

Me levanté como pude y caminando lo más rápido que mis piernas me lo permitían, me alejé, oí a Cristopher gritarme, pero yo lo ignoré me metí en los baños de la escuela cerré la puerta del cubículo y me senté en el suelo a llorar, me sentía miserable y las lágrimas no dejaban de caer por más que intentaba pararlas con mis manos y reprendiéndome a mí mismo, oí que tocaban la puerta, me limpie las lágrimas velozmente sin importar el daño que le estaba haciendo a mis ojos, mientras gritaba con fuerza. "ESTA OCUPADO ¿QUE NO VEN?" A lo que la persona que estaba afuera me contestó. "Blanquito sal de ahí de una vez Alex te está esperando"

Era Antón mi mejor amigo el único que sabia sobre mi enamoramiento no correspondido con Cristopher; UN chico alto algo corpulento, de tez morena oscura con ojos bastante expresivos, de color café oscuro juraría que eran negros. En esta ocasión sinceramente no tenía ganas de escuchar su sermón de tres clases sobre porque "chocolate" no era bueno para mí, limpie mis lágrimas y abrí la puerta con fuerza, con la clara intención de que se apartara de mi camino, pero estaba claro que del sermón del día no me iba a librar tan rápido, me acorralo antes de que pudiera salir del cubículo, me sacaba cuando menos unos 7 centímetros así que en grandullón se hacía respetar si o si y me hacía respetarlo también y esta ocasión no iba a ser la excepción pero había algo distinto esta vez , en otras circunstancias ya me hubiera dicho hasta de lo que me iba a morir pero esta vez solo me miro y me abrazo contra sí .

" Blanquito, tú no te mereces este trato, tú eres más que un perro faldero, por favor ya no te lastimes, sabes que no estoy en contra de que seas gay pero no estoy a favor de verte triste o así de mal"

Felicidades, Antón, tenías que venir a hacerme dudar. Él tomó mi mejilla con sus manos y con su pulgar limpio unas de las lágrimas rebeldes que se me habían escapado, hasta ese momento no me había percatado de la cercanía de su cara y la mía, tan despistado como para notar en qué momento sus manos bajaron a mis caderas, solo subió su mano a mi nuca y me empujo a su boca curiosamente no era tan malo como lo imaginaba, sus labios eran dulces, parecía que ansiaba demasiado ese beso aun así no me presionó, ni me empujo para más, es como si el solo quisiera sentirme cerca, mi boca se atenía a él, ninguno de los dos era primerizo , pero a la vez parecíamos niños que apenas estábamos dando nuestro primer beso, sus labios eran tan cálidos, aunque me sentía seguro con él, decidí separarme de él lo aparte de mi cuerpo con suavidad y camine aún más confundido de lo que ya estaba al entrar a ese sitio