𝐄𝐋 𝐑𝐄𝐘 𝐃𝐄 𝐋𝐎𝐒 𝐁𝐔𝐇𝐎𝐒 |Lord Milori y la Reina Clarion|

𝑳𝒊𝒃𝒓𝒐 𝒅𝒐𝒔: 07

"Esto puede doler un poco", advirtió Helena.

Milori estaba de cara a la pared, apoyándose con las manos mientras Helena le limpiaba las heridas.

Dejó escapar un gruñido bajo y clavó las uñas en la pared helada mientras Helena limpiaba la sangre.

"Te advertí que te picaría".

Dejó escapar una risa corta por lo bajo. Entonces comenzó a concentrarse, no sabía exactamente cómo habían llegado a ser sus heridas, pero sabía que no era exactamente normal.

Milori se sentó en su lechuza, mirando al pájaro mientras graznaba.

Prácticamente podía ver el sonido moverse hacia él mientras se concentraba en el recuerdo.

Mientras se envolvía, notó que el pájaro todavía estaba posado en la rama, no muy lejos de él. Se concentró en observar al pájaro, ya que después de unos momentos el pájaro aún no se movía. Entonces comenzó el dolor y la sensación de garras clavándose en su espalda. Se giró para no ver una criatura al lado de su visión de búho. Pero aún sentía el dolor de las garras en lo profundo de su piel que le desgarraban la espalda. El dolor se hizo insoportable y empezó a caer. Mientras caía notó que el cuervo todavía estaba posado en el árbol.

"Eso debería bastar", dijo Helena.

Milori volvió a la vida y miró a su alrededor, estaba de vuelta en su habitación.

Cuando Helena empezó a empacar sus cosas, entró el Guardián. Dejó escapar un suspiro ante lo que definitivamente se convertiría en cicatrices en la espalda de Lord Milori. "Eh-hem,".

Milori se volvió hacia él.

"Eres uh... necesario en el Gran Comedor".

Después de que Milori se pusiera un atuendo menos cubierto de sangre, el Guardián lo acompañó al Gran Comedor. Una vez allí, Milori se sentó en la cabecera de la mesa, el Guardián se sentó a su lado. En el extremo opuesto de la mesa había una silla vacía, que habría sido donde se sentó Clarion. Fairy Mary se sentó al lado de la silla vacía. Los ministros y los que estaban a cargo de los grupos de talentos ocuparon los asientos entre los dos extremos de la mesa.

"Guardián", susurró Milori.

"Oh, claro", Dewey se puso de pie. "Que comience esta reunión del Consejo de Pixie Hollow", y golpeó su bastón tres veces en el suelo.

Instantáneamente todos comenzaron a discutir entre ellos, especialmente Red y Snow. Milori se paró solo un momento y luego todos se callaron.

"Ahora, Redleaf".

"¡El árbol de polvo de hadas! La producción de polvo de hadas ya se ha ralentizado", gritó Redleaf.

"¿Qué pasa con el árbol en sí?" Sunflower interrumpió.

"¿Qué hay de traer las estaciones al continente?" Rumble preguntó desde un lado de Glimmer.

"¿Qué pasa con nuestros talentos?" gritó el hada del talento animal que ahora era un hada del agua.

"¡Si la reina Clarion estuviera aquí, sabría qué hacer!" dijo otra hada.

"¡Sin la Reina Clarion, el árbol morirá y no tendremos a nadie que nos gobierne!" gritó el hada del jardín en la mesa.

"¡SUFICIENTE!" Milori gritó al otro lado de la mesa. Ahora estaba de pie y sus manos estaban cerradas en puños sobre la mesa. "A ninguno de ustedes realmente les importa que ella se haya ido, ¿verdad?".

Observó cómo los ojos de Snow viajaban detrás de ella hacia Hyacinth. Hyacinth levantó dos dedos como si fuera a levantar la mano, pero volvió a caer sobre la mesa.