𝐄𝐋 𝐑𝐄𝐘 𝐃𝐄 𝐋𝐎𝐒 𝐁𝐔𝐇𝐎𝐒 |Lord Milori y la Reina Clarion|

𝑳𝒊𝒃𝒓𝒐 𝒅𝒐𝒔: 13

El cuervo anormal dio unos pasos hacia adelante, de cerca, el cuervo tenia la altura de un humano. De repente, Fiona comenzó a cargar contra el pájaro. Luego, cuando saltó sobre él, con las garras extendidas, con un movimiento de las alas anchas del cuervo anormal, el lince se convirtió en un gatito. La multitud de hadas dejó escapar gritos ahogados cuando Fiona corrió hacia Dewey y se escondió detrás de él.

Dewey estaba genuinamente sorprendido más allá de lo creíble. Ningún animal tenía estos misteriosos poderes, a menos que... Se dio cuenta de que no era un cuervo, sino un enemigo más intimidante. Dewey miró a las aterrorizadas hadas detrás de él por el rabillo del ojo. Redleaf estaba siendo retenido por dos cuervos y luchaba por liberarse. Girasol y Jacinto estaban paralizados de miedo junto con la mayoría de las otras hadas mientras miraban al gran pájaro.

"¡No tienes nada que hacer aquí!" Dewey llamó al pájaro.

"Oh, ¿no?", respondió el cuervo. Una nube de humo lo envolvió rápidamente, luego se dispersó con la misma rapidez, dejando a la criatura en su verdadera forma, un hombre con pico de pájaro. "Muy pronto todos seréis mis esclavos".

"No hay forma en todo Neverland de que nos convertimos en esclavos tuyos".

"¿Incluso si eso significa salvar a uno de los tuyos?". Con el chasquido de la mano del hombre con pico de pájaro, una bocanada de humo apareció de repente en su hombro. Con él vino otro cuervo sosteniendo una figura marrón y blanca.

"¡Snowflake!" Grito Redleaf. Luego, los cuervos lo agarraron con más fuerza y ​​dejó escapar un gruñido de dolor.

Snow trató de liberarse, pero tenía las manos atadas a la espalda y una tela envuelta alrededor de su boca.

"Alguien se preocupa por esta hada. Ahora te sugiero que comiences a tomar mis órdenes".

"¿Y si no lo hacemos?" Dewey lo llamó.

"Bueno, tendré que matarla".

Snow gritó tan fuerte como pudo, pero la tela amortiguó sus gritos.

"¡No!" Redleaf gritó.

Todos en la multitud ahora estaban nerviosos, esperando su destino y la respuesta de Dewey.

Algo llamó la atención de Dewey más allá del hombre con pico de pájaro. Fairy Mary y los otros caldereros estaban en los árboles que estaban distantes detrás del hombre. Entre los caldereros también había una flota de lechuzas. Él les devolvió la mirada con los ojos muy abiertos, se había olvidado por completo de que habían estado en el árbol toda la mañana. Fairy Mary captó su mirada, inclinó la cabeza, diciéndoles que esperaran su señal en los árboles en esa dirección. Ella le devolvió la cabeza y los caldereros saltaron sobre las lechuzas y volaron en esa dirección.

"Entonces, ¿qué va a ser? ¿Todas estas hadas o esta?". No parecía haber notado a Fairy Mary y los demás todavía.

Dewey permaneció en silencio y no respondió.

"Muy bien, entonces, han hecho su elección y todos aprenderán del poder de Nefarious, rey de los cuervos". Nefarious comenzó a levantar la mano.

Todos estaban asombrados, ¿cómo podía Dewey dejar que mataran a Snow? A este ritmo iba a hacer que los mataran a todos.

Nefarious sonrió maliciosamente, sus dedos se convirtieron en garras largas y afiladas. El miedo recorrió a Snow cuando sus garras se acercaron.

Dewey de repente dejó escapar un fuerte silbido y gritó: "¡Ahora!".

De repente, la flota de búhos se lanzó entre cada uno de los cuervos, con los caldereros cabalgando sobre ellos. Uno tiró al suelo a los dos que sostenían a Redleaf. Los cuervos se convirtieron repentinamente en bocanadas de humo y desaparecieron.