La Boda de mi Mejor Amigo. - Fic Reeditado 2022

Cap. 3 - Fiesta de despedida para dos

La boda de mi mejor amigo - FanFic

Cap. 3 - Fiesta de despedida para dos.

El día pasó muy lento, sumándole la desesperación y la preocupación por no haber visto en todo el día a su amada prometida. El sonido de la puerta de su oficina lo sacó de entre sus pensamientos y pronto se incorporó en su silla presidencial.

- Pase. - Dijo haciendo como si estuviese muy ocupado revisando aquellos documentos que llevaban horas sobre su escritorio.

- Naruto, hijo... ¿Cómo te encuentras? - Preguntaba a su paso el mayor de aquella habitación.

- Jiraiya... - Atinó a decir mientras soltaba un suspiro. Su padrino sabía de antemano lo que pasaba por su cabeza, no por nada, el día anterior le había pedido consejos sobre su situación.

- ¿Qué pasó con Sakura? - Directo y sin quitarle la mirada de encima, preguntó sin titubeos mientras se acomodaba en la silla que estaba enfrente del escritorio.

- Nada. - Dijo seriamente su ahijado y luego volvió a respirar muy profundo. - Me di cuenta de que a quien verdaderamente amo, es a Hinata. - Confesó con algo de tristeza. - Ayer fui un estúpido, yo... besé a Sakura. Estuvimos a punto de hacer algo de lo cual no me hubiese perdonado jamás... Hinata es demasiado para mí, si ella se llegase a enterar... ¡No quiero ni imaginármelo! - Exclamó muy frustrado consigo mismo.

El de cabellos blancos solo suspiró tranquilamente y luego sonrió.

- Me alegro de que por fin te hayas dado cuenta de tus propios sentimientos. - Dijo guiñándole un ojo.

- ¿Qué quieres decir? Hablas como si supieras lo que hay en mí.

- ¡Por supuesto que lo sé! - Exclamó energéticamente. - Pero no era yo quien tenía que decirte, eras tú quien se tenía que dar cuenta por sus propios medios. - Confesó alegremente.

Naruto solo suspiró mientras le dio la espalda para ver a través de la ventana de su oficina. Ahora que recordaba, eran ciertas aquellas palabras de Jiraiya. Mientras trataba a Hinata, se había dado cuenta que siempre buscó llamar su atención, impresionándola con ciertos actos, portándose menos torpe y un poco más astuto e inteligente, solo para estar a su nivel. Recordó que siempre buscaba tratarla de la mejor manera posible para no hacerla enojar, para no ofenderla o hacerla entristecer... siempre había buscado mantener una relación discreta para complacer a sus suegros, se había mantenido al margen para no sobrepasarse con ella, ahora lo más valioso que podía tener. Rio hacia sus adentros, era cierto... estaba perdidamente enamorado de ella y no podía ni siquiera negarlo o disimularlo en esos precisos instantes.

...

Hinata yacía recostada en su cama, su cabeza dolía pero sus lágrimas no dejaban de brotar, como si ella fuese un mar que en esos momentos se estaba desbordando por sus propios ojos. No tenía ganas de vivir, su corazón dolía a más no poder y entre sus recuerdos, vagaba aquella noticia dada por Ten-ten e Ino, al igual que aquellas imágenes que aun rondaban por su memoria.

La puerta de su habitación volvió a sonar pero se negó a hacer caso, no estaba en un buen momento.

- Lo siento señor Uzumaki... - Se escuchó la voz de la mucama hablar a través de su puerta. - Al parecer la señorita Hinata se quedó dormida. - Decía aquella mujer. - Si, en cuanto se despierte le diré de su llamada.

Hinata volvió a llorar, no tenía fuerzas ni ganas para enfrentar su realidad, pero sabía que de seguir así haría que su prometido la buscara y lo que ella menos quería, era enfrentarlo ese día.