𝗥𝗜𝗡𝗔𝗦𝗖𝗘𝗥𝗘│𝗔𝗛𝗡 𝗦𝗢𝗢-𝗛𝗢│𝗪𝗘𝗔𝗞 𝗛𝗘𝗥𝗢 𝗖𝗟𝗔𝗦𝗦 𝟭

OO2.

서울대학교병원. (𝗛𝗢𝗦𝗣𝗜𝗧𝗔𝗟 𝗨𝗡𝗜𝗩𝗘𝗥𝗦𝗜𝗧𝗔𝗥𝗜𝗢 𝗗𝗘 𝗦𝗘𝗢𝗨𝗟).

𝟮𝟬𝟮𝟯.𝟯.𝟭𝟱. (𝟭𝟱 𝗱𝗲 𝗺𝗮𝗿𝘇𝗼 𝗱𝗲𝗹 𝟮𝟬𝟮𝟯).

No sabía muy bien que había pasado, no sabia que nombre darle a la desconocida sensación que abrazó mi cuerpo en el momento en que entré a ese baño y empecé a cambiarme.

Lo único de lo que si estaba muy conciente era de que mi cuerpo estaba actuando por si mismo desconectandose de mi cerebro, como si mi cabeza y cuerpo fueran dos partes completamente distintas.

De alguna manera mis manos quitaron y pusieron cada prenda de ropa que yacía en la bolsa sobre el retrete en mi cuerpo con la misma precisión de una coreografía preparada con anticipación, mientras que mi mente parecía haber comenzado un largo viaje por el espacio-tiempo.
 
Los típicos sonidos de ambulancias y enfermeras corriendo de un lado para otro fuera del baño se empezaban a escuchar lejanos y con tal interferencia que me hizo sentir como si estuviera siendo abrazada por un frío manto de agua que a su vez tapó mis oídos y bajó por mi cuerpo hasta dejarme fuera de tono.

Mi vista se había mantenido fija e inmutable en dirección al espejo del baño, cualquiera que me viera podría decir que de un momento a otro el material del espejo se hizo sumamente interesante ante mis ojos.

No fue hasta que escuché como la puerta era tocada firmemente durante tres veces que mi cuerpo pareció reaccionar y salí de mi ensoñación colocando una mano en mi pecho mientras comenzaba a respirar de manera acelerada como si por alguna razón, se me hubiese privado de la posibilidad de hacerlo.

Miré confundida a mi alrededor, la ropa que antes tenía puesta estaba en una canasta al lado de la bolsa que contenía con anterioridad la ropa seca, y la ropa seca que se suponía que antes estaba en la dicha bolsa… Estaba sobre mi cuerpo dándole una sensación de calidez.

¿En qué momento me cambié por la ropa seca?

No recordaba nada.

Absolutamente nada.

Mi memoria estaba en blanco.

— ¿Mi niña? Es papá, vamos, te llevaré a casa — escuché la voz de mi padre hablar en un tono dulce e intentando llamar mi atención. Un sentimiento de calidez se coló en mi corazón cuándo pensé en lo mal que se debe estar sintiendo mi padre en este momento. 

Me dispuse a acercarme a la puerta del baño queriendo abrirla, pero me sorprendí por el simple hecho de que sentía las piernas cansadas y entumecidas al igual que mis hombros, a tal punto que de repente empezó a surgir una enorme necesidad de recostarme en mi cama y dormir durante todo el día sin ser molestada por nada ni nadie. Pero no podía dormir todo el día. Mañana tenía clase.

Suspiré al recordar, menos mal había hecho las  tareas pendientes para mañana, pero ¿A qué costo? Miré al techo rogando porque el día de mañana no colocaran más tareas de las necesarias y abrí la puerta sintiendo de nuevo esa pesadez en mi cuerpo, la cuál se desapareció en el momento en que fui recibida por el cálido cuerpo de mi padre abrazando mis hombros con uno de sus caros chalecos.

¿Cómo había llegado tan rápido?

¿Estaría cerca de aquí?

O quizá… ¿El tiempo se me había pasado tan rápido que ni me había dado cuenta?

A pasos rápidos guió mi cuerpo hacia llegar a la camioneta, y me subió en los asientos traseros con delicadeza, para después subirse al asiento del conductor y a su vez, arrancar el auto.

Extendiendo mi cuerpo vi la oportunidad perfecta para dormir, por lo tanto, hice lo que mi distraída mente pudo maquinar en unos cuantos minutos.

Teniendo en cuenta de que casi siempre que me iba con mi padre para el colegio o algún otro lado aprovechaba para recostarme y echar una siestita, se encargó de comprar unas pequeñas almohadas y mantas, las cuales tiene guardadas en uno de los compartimientos inferiores de los asientos, bajé la mano y tomé una de las mantas y una de las almohadas que estaban allí guardadas, y teniendo en cuenta de que el viaje en auto desde el hospital hasta casa era de más de 10 minutos, iba a disfrutar de más de 10 minutos de siesta.

Por el rabillo del ojo pude observar como mi padre dejaba escapar una sonrisa de lado al verme y eso me resultó un poco confuso pero decidí ignorarlo al no sentir la suficiente fuerza como para encararlo, ignorando el hecho de que se sentía dichoso.

Dichoso porque yo parecía haber recuperado esa costumbre de dormirme mientras voy de viaje.

Dichoso porque al fin me veía dispuesta a descansar así sea un ratito.

Escrito: 15/03/2023.
Pasado a limpio: 25/04/2023.
Publicado: 25/04/2023.