DESTRUCTOR DE SUEÑOS

CAP 01

- ¡Namjoon! ¡¿Qué mierda es esto?!

Soyoon lanzó la carpeta de papeles al rostro del moreno. Estaba demasiado molesta, pues no esperaba empezar su día con una llamada de su abogado informándole sobre los planes atroces de su querido esposo.

- Quiero el divorcio - el alfa lo miró desafiante - ¿No fui lo suficientemente claro esa noche?

La mujer rió sarcástica. Ni en sus más terribles pesadillas cometería la estupidez de cederle su libertad sin antes sacar provecho a la situación. Ignorando el hecho de ser la única causante de tal abrupta decisión.

Soyoon era consciente que para el empresario una humillación de cualquier tipo de rango era imperdonable y no se imaginaba las consecuencias que podría tener con el tiempo cuando su traición fuera revelada ante los ojos de los demás.

- ¡No voy hacerlo! - gritó histérica

- ¿Enserio?

Kim elevó las comisuras de sus labios dispuesto a atacar. - Soyoon no te conviene darme la contra - advirtió el moreno caminando hacia la pequeña repisa donde se encuentraba su acompañante en tiempos de estrés.

Una fina y gruesa botella de whisky.

- Estoy hablando enserio, Joon. No voy a divorciarme de ti. - sentenció

- Vas a hacerlo. Es una orden.

- ¿Orden? - la pelinegra elevó una ceja para después soltar una gran carcajada. - creo que te estás equivocando conmigo, no soy uno más de tus perros.

- Mis perros nunca morderian la mano que se les da de comer. - contraatacó el alfa antes de tomar un sorbo de su bebida.

Soyoon se cruzó de brazos totalmente ofendida. - Lo que pasó con Sehun fue un error, no volverá a suceder.

- Claro que no volverá a suceder - aseguró el mayor con una sonrisa. Soyoon desvió la mirada hacia el gran ventanal de la oficina de su esposo, tratando de distraer su mente. - porque está muerto. - culminó Namjoon bebiéndose hasta la última gota del alcohol.

Los ojos de la pelinegra se abrieron de golpe al poco tiempo de escuchar esas palabras. Negó repetidas veces con la cabeza mientras que las lágrimas se acumulaban en sus párpados.

- ¡Eso es mentira! ¡Dime que es mentira! ¡Él no puede estar muerto! ¡Namjoon tu me prometiste que no harías nada en su contra! ¡Lo prometiste! - Sooyoon rompió en llanto hincandose ante él.

- Deja de acusarme que yo no tengo nada que ver con su muerte ¡Ahora firma los malditos papeles!

Desde un empiezo sabía que su relación con Sehun iba a traerle problemas a futuro pero nunca pensó que su amante correría un final tan vil. Para una mujer tan orgullosa como lo es Soyoon, le era difícil aceptar que se había enamorado de su amante.

Sin embargo ahora se lamentaba no poder confesarle desde el primer comienzo que logró amarlo como nunca nadie lo hizo.

- No voy hacerlo, no después de lo que hiciste. - La chica intentó levantarse pero un fuerte mareo la azotó ocasionando que perdiera poco a poco la visibilidad de la vista.

Con el pasar de los segundos, su cabeza parecía querer estallar. Soyoon llevó sus manos a la cabeza pensado que de esa manera el dolor se aliviaría. Cosa que no sucedió, porque el dolor solo terminó expandiéndose y deteriorando por completo su vista hasta desplomarse y perder la consciencia por el frío suelo.

Namjoon al ver la escena barata de su ex-mujer solo suspiró y prendió el aparato donde se comunicaba con su asistente.

- Kim, llama a la ambulancia. Soyoon acaba de desmayarse. - informó serio