Mi extraña vida.

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Siempre vi el mundo como una perspectiva un poco extraña, me parecía que lo veía de una manera diferente a como lo veían mis compañeros, amigos, familiares o cualquier otro ser humano que era cercano a mi.

Llevaba viviendo 16 años de la misma manera.
Siempre haciendo las mismas cosas, sobre pensando mis decisiones y sobre todo, en una lucha constante conmigo misma, esta lucha aunque era protagonizada en mi interior, afectaba muchísimo mi exterior. A pesar de esto, la lucha se había hecho parte de mi, ya no había manera de deshacerme de ella (o tal vez ya no quería), no podía arrancarla, le habían salido raíces que ahora se aferraban fuertemente a lo profundo de mi ser. Cada cuánto tenía que cortarle un poco las raíces a esta lucha y tenía que intentar ir contra la marea, pero en algunas ocasiones me resultaba tan difícil que me dejaba llevar por la corriente y simplemente volvía dejar que todas las raíces crecieran en mí hasta asfixiarme de una manera increíble.

A pesar de esto, intentaba esconder todos los días mi lucha a mis amigos y familiares, personas que se encontraran a mi alrededor. Siempre quería dar la impresión de ser alegre, carismática, bonita y alguna veces incluso, un poco tonta. Todo esto para poder encajar con los estándares de todos, o mejor dicho y para ser más clara, los estándares de los adolescentes. Todos los días peleaba con no sobre pensar tanto las cosas, en no preocuparme por mi futuro, en solo pensar en cosas banales como que outfit utilizar para el día siguiente.

Todo esto comenzó incluso a agravarse más después de haber comenzado a vivir la pandemia, al estar encerrada todo el tiempo con mis propios pensamientos, sin la necesidad constante de ser una adolescente normal, comencé a quebrarme cada día más. Mi alma estaba por los suelos, no me reconocía (o tal vez si, pero me daba miedo hacerlo), mi mente comenzó a darse cuenta entonces, que debía enfocarla en cosas que me ayudaran y que no me auto destruyeran. Fue entonces cuando se me ocurrió hacer un libro, como toda chica de 16 años, un libro sobre amor.

En primera instancia, consideré inspirarme en mi cantante favorito del momento para el personaje principal de mi historia de amor, sin embargo, al empezar a escribir, sentí que era como escribir un fanfic y esta idea no me llenaba para nada. Yo quería poder ser capaz de escribir una novela incluso, en la que todos los personajes tuvieran su propia individualidad y que incluso se sintieran reales, que fueran personas vivientes y reales, no personas falsas creadas por mi imaginación. Ahí fue cuando comencé a prestarle atención a cada uno de mis amigos hombres.

Cuando lo digo de esta manera, se que suena totalmente mal y extraño, pero nunca lo hice con esa intención. Todo partió del hecho de que queria basarme en un hombre real al cual le tuviera confianza y hasta cierto aprecio, así en parte me daba la sensación de que mi personaje estaría vivo de alguna manera, para después en mi obra poder moldear su personalidad y su apariencia a mi gusto.

Para ser verdad, comenzó siendo bastante dificil por que para aquella época yo aun estudiaba desde casa, mientras que la mayoría de mis compañeros ya comenzaban de nuevo la escuela presencial, y a pesar de haber rogado tanto tiempo, no logre convencer a mis padres de dejarme volver a la escuela. Viendole el lado bueno a la situación, así podia inspirarme menos en la personalidad de la persona que fuese a elegir, podia simplemente stalkear instagrams hasta encontrar a alguien que me parecia coincidiera con lo que queria para mi historia.

Ironicamente, termine tomando aun chico nuevo que habia entrado en el año en linea de la prepatoria, no lo conocia muy bien pero habia hablado un par de veces con el debido a que se habia vuelto muy amigo de mi circulo social, por lo que senti que conocia lo suficiente de el para poder hacerlo la inspiracion de la historia de mi proxima historia, aparte tenia el plus que solo lo habia visto una vez en persona en una fiesta de una amiga muy cercana a mi, por lo cual si estaba muy al tanto de como se veia fisicamente en persona.

Lo que me llamo mas la atencion, fue su nombre, Aleph Apolo. Un nombre muy llamativo pero que nadie cuestionaba por alguna razon, o al menos yo no habia escuchado a nadie hacerlo. Aleph tocaba la guitarra, piano, bajo, cantaba, tenia una banda, era un chico al cual le gustaba leer, tenia el cabello no tan largo pero tampoco tan corto, su cabello era castaño oscuro, casi negro, unos bonitos ojos cafes, con una mandibula prominente, de bonita sonrisa, flaco y mas alto que yo. Mis unicas interacciones con el habia sido hablando de mi ex, hablando de tareas y sobre una que otra cosa que parecia salir en la conversacion, parecia tener un buen sentido del humor pero no tenia mucha idea de esto debido a lo poco que sabia de el.

Después de haber creado esta idea en mi cabeza, comencé a escribir sobre el.

Y desde ese entonces ya jamas pare.

(AMAR)ILLODonde viven las historias. Descúbrelo ahora