II

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           Me encontraba haciendo las compras para llenar mi almacén de comida. No quería tener que comprar comida rápida todos los días y a mi hermano le importa poco que consuma, su responsabilidad como tutor deja mucho que desear.

Llene mi carro de cualquier cosas que viera comestible y apetecible, en estos momentos es cuando más extraño a Laura, ella era quién se encargaba de esta cotidianidad de nuestras vidas. 

Cuando me dirigía al auto, con las bolsas de compra, fue cuando a mis oído llego un ruido extraño, pero penetrante. Dejé caer las bolsas, topando mis oídos del chillido. Agradecía no tener por completo desarrollado mi audición o me hubiera provocado un terrible dolor de cabeza. 

Saque mi celular, mandándole un mensaje a mi hermano para preguntar sobre su paradero. El muy desgraciado no me respondió hasta que estuve de camino a mi departamento y solo para advertirme que me quedé en casa y no salga.



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A la mañana siguiente. Me dirigí al instituto con buen humor. 

Estacione mi vehículo en el mismo lugar que ayer. Me dirigí al edificio, donde metros más adelante, los amigos problemáticos conversaban. Agudice mi oído para saber de qué hablaban, porque la expresión seria de Stiles llamó mi atención.

—... De lo que pasaba por tu mente mientras te transformabas. —Scott no respondió, aun confuso, así que Stiles fue más explícito—. ¿Qué te atraía?

—Allison.

Rode los ojos, pero no lo culpaba. Uno enamorado era una cosa que da pena.

— ¿Nada más? —indago Stiles con hastió— ¿En serio?

—No importaba nada. —Stiles frunció los labios—. Pero es bueno, ¿no? Porque cuando mordieron a Lydia, ella estaba contigo.

Así que hablan de la loca que camina desnuda por el bosque, la última a la que mi tío mordió.

—Si, pero estaba buscando a —miró hacía dirección a la primera fila de estacionamiento, donde aparque mi auto. Un auto deportivo color gris metálico se estaciono a lado del mío— Jackson.

Miré al muchacho con porte engreído bajar del vehículo. —Ah si, el otro idiota que rogaba por ser parte del grupo sobrenatural. 

Dirigí mi atención al frente, volviendo a mantener el ritmo en mi caminata. 

—Hola —salude a Stiles que de forma automática dirigió su mirada en mí, formando una sonrisa.

—Missy, ¡hola!

— ¿Todo bien? —pregunte de forma amable, sin borrar mi actitud animada.

—Si, si —luego se me quedo mirando tan fijo que me puso algo nerviosa.

—¿Qué? —pregunte llevando mi mano derecha a mi hombro, rascando la zona. 

—Missy —dijo con una nueva luz, sus ojos brillaron ante alguna repentina idea—. ¿Qué pensabas cuando ta transformaste?

Parpadee confusa. — ¿Qué?

—Si, ya sabes, hombre lobo, mujer loba en tu caso —explico haciendo ademanes con las manos.

—Ah —fruncí el ceño sin saber que responder. La verdad era que, en los días de luna llena no me volvía tan loca porque no podía lograr transformarme—. Ira.

— ¿Cómo Derek? —pregunto Scott confuso.

—Ira y miedo. —Fui más explícita—. Para todos no es igual, para los principiantes lo que más les domina es el instinto asesino, se pierden en una faceta animal en el que su lado humano desaparece.

Enchanted | Stiles StilinskiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora