5- Parte 4

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Un espacioso vestíbulo de mármol se extendía frente a mí. Supuse que estaría cubierto de sangre por todas partes y cadáveres esparcidos, pero ese no fue el caso. Excepto por las macetas volcadas y rotas y el sofá que había sido apartado, no había nada muy diferente de lo habitual.

Sin embargo, inhalé y exhalé lentamente mientras sostenía el hacha. Un ligero olor a sangre se mezclaba en el aire. Miré alrededor. El pasillo estaba dividido en dos lados del vestíbulo.

El lado con la oficina administrativa y la sala de lectura, y el otro lado con la tienda de conveniencia y la cafetería.

De repente recordé que una persona había muerto en la cafetería. Mi mirada fue hacía allí. A primera vista, parecía como si una sombra negra se reflejara a lo lejos a través de la gran puerta de vidrio. ¿Es una persona viva o no? No quería ir a comprobarlo. Fui al otro lado del pasillo.

Al pasar por el baño, escuché un gruñido detrás de mí. Fue espeluznante. Mire hacia atrás.

- Keuuuuuu, kuh..................

A través de la puerta abierta, un hombre cubierto de sangre salió lentamente. Su cabeza estaba caída en un ángulo anormal, probablemente porque los músculos de su cuello estaban amputados. Cada vez que caminaba, su cabeza se balanceaba de un lado a otro. La sangre en mi cuerpo se enfrío. Estaba preparado para encontrarme con ellos una vez que bajará al primer piso, pero no esperaba encontrarlos tan repentinamente.

Levantó la cabeza y me miró. Era una apariencia grotesca que no parecía ni viva ni muerta, sino descompuesta. Sin darme cuenta, pensé que era una suerte que no fuera Jung Ho Hyun. Apreté los dientes y levanté el hacha. Tan pronto como lo golpeé, cerré los ojos por reflejo.

Sangre podrida me salpicó en la mejilla. Era una sensación indescriptiblemente asquerosa. Era como si una gran bolsa llena de desperdicios de comida me hubiera estallado. Balanceé el hacha repetidamente. Luché con mis extremidades, pateé y empujé al oponente que corría hacia mí y me atacaba constantemente.

Sin embargo, no mostraba signos de morir. Tenía las costillas aplastadas, el pecho partido y el cuello cortado por la mitad, pero siguió moviéndose. Mi brazo que sujetaba el mango del hacha se volvió cada vez más pesado. Me temblaban las manos.

Era una tontería. No importa cuán fuerte fuera la droga, no importa cuán terrible fuera la enfermedad, no podía moverse hasta llegar a ese punto. Era demasiado poco realista. ¿No son como zombis que solo aparecen en juegos de acción de bajo presupuesto?

......................... ¿zombis?

¡Mierda! El golpe con fuerza finalmente destrozó el cuello del oponente. El cuerpo hecho jirones estaba esparcido. Esperé pacientemente sin disminuir la velocidad. Pero no se movió más.

- ¡Dios mío................ Vaya ah, ah!

Me sentí mal del estómago y mis ojos daban vueltas. Contuve mis náuseas y me limpié la mejilla con el dorso de la mano. Me puse la mascarilla que me había bajado hasta la barbilla.

Llegué a la oficina administrativa. Podía ver el interior a través de una ventana en el pasillo. Alguien estaba sentado en una silla, cabello castaño ahumado. Era Jung Ho Hyun.

- ¡Jung Ho Hyun!

Grité llamandolo. Pero él no reaccionó. Apartó la cabeza de mí para que no pudiera verle la cara. Llegué demasiado tarde. Mi corazón dio un vuelco.

Giré el pomo de la puerta. No pude abrirla porque estaba cerrada por dentro. Después de llamarlo por su nombre unas cuantas veces más, decidí que esto no funcionaría. Golpeé el mango con el hacha tan fuerte como pude. ¡Craak! Todo el mango se cayó con un sonido desagradable. Se hizo un agujero redondo en la puerta.

Dead Man Switch - Tomo 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora