Borracho y Dulce [Kaveh & Al-haitham]

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No podía dejar de pensar en cómo fuera mi vida si Al-haitham fuera mi pareja, ¿Seguiríamos peleando?, ¿Me trataría mejor?

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Llegue a casa y note que Kaveh no estaba, me preocupe mucho ya que tenia que estar en reposo, iba a salir justo cuando llego Kaveh.

– ¡KAVEH IDIOTA!,¡¿POR QUE SALISTE!?

– No me hables así – Abrazo a Alhacén y empezó a llorar en su pecho

– ¿Estas tomado?

– No..

– Mientes, Como puedes emborracharte y salir como si no tuvieras una herida que se puede abrir en cualquier momento

– Me descuidaste por ir a la academia

– Kaveh.. necesito ir a la academia

– ¿Ya no me quieres?

– ..

– Dime que me quieres

– N-no

– Pero si ya me dijiste que me amas

– Lo sé.

– Ándale Alha, dime que me quieres, ¿Quieres a tu bebé?

– Esta bien, Te quiero – Le costó decirlo ya que estaba bastante nervioso, sabía que cuando Kaveh estaba tomado parecía un niño pequeño

– Te voy a preparar un té – Cargo a Kaveh y lo dejo en el sillón de la sala

– No me dejes solo

– Ush, Ya te traigo tu té

– Pero venn – Kaveh empezó a hacerle berrinche a Alhacén

– Kaveh ya tienes 20 años no puedes estar haciendo berrinche

– Y que tiene

– Eres irritable cuando estas borracho

– Y tu un idiota

– Te odio

Kaveh se quedó en silencio, y sin darse cuenta estaba llorando, sentía dolor en el pecho, ya que últimamente andaba un poco sensible y cualquier cosa que le dijera Al-haitham le afectaría

– ¿Kaveh?

– ¿Mmh?

– ¿Estas llorando?

– No

– ¿Fue por lo que dije?

– No – Hizo su mayor esfuerzo para levantarse e irse a su habitación

– Kaveh no hagas esfuerzo

Kaveh asintió con la cabeza y cuando estaba apunto de ir a su cuarto se quedó quieto y soltó un quejido de dolor

– Kaveh..

– N-No es nada..

– Idiota deja que te ayude – Fue hacia donde el estaba y le agarro la mano

– Esta bien..

Al-haitham llevo a Kaveh a su cuarto, Kaveh solo se acostó en la cama y se quedó en silencio, Al-haitham salió de la habitación ya que suponía que quería estar solo.
El ya no sabía si estaba así por lo hebrio que estaba.

Al-haitham se puso a leer un libro en el sillón cuando escucho los sollozos de Kaveh.

Dejo su libro a un lado y abrió la puerta de la habitación de Kaveh

– ¿Kaveh?

– ¡VETE!

– No me voy a ir, ¿Que sucede? – Dijo acercándose a Kaveh

– No te quiero ver..

– ¿Hice algo malo?

Kaveh solo se quedó en silencio

– ¿Que hice?

– N-Nada

– Kaveh no se si estas hebrio o estas consiente

– Estoy consiente, Idiota

– Deja de tratarme así y dime

– Alhacén.. T-Tú – Kaveh volteo a ver a Al-haitham y se puso más nervioso de lo que ya estaba

– T-Tú m-me..

– ¡AL-HAITHAM ME GUSTAS!